México.- La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) presentó al grupo de expertos en manejo adecuado de sustancias químicas el proyecto de creación de la Unidad de Sustancias Químicas (USQ) que tiene como objetivo mejorar su capacidad para la gestión racional de las mismas y de los residuos peligrosos en el país.
El equipo de trabajo lo conforman especialistas del sector empresarial, académico, del gobierno federal y organizaciones de la sociedad civil que participan en el diseño del proyecto para enfrentar las dificultades propias de la gestión racional de productos químicos durante su ciclo de vida.
Con la ejecución del proyecto se busca dar cumplimiento a los convenios internacionales en la materia, encaminado a evitar la atención tardía que representa riesgos a la salud humana y al ambiente.
El plan se presentará ante ONU-Medio Ambiente, instancia que lo analizará para su eventual aprobación, y dará paso a la creación de la Unidad de Sustancias Químicas en México y a la asignación de financiamiento.
El entorno mundial se encuentra inmerso entre sustancias sintéticas, ya que cotidianamente utilizamos desodorantes, cosméticos, aditivos y suplementos alimenticios, entre muchos otros que nos hacen la vida confortable y nos permiten el uso de materiales con propiedades insospechadas; equipos de comunicación, aparatos domésticos y productos de limpieza, compuestos tóxicos para el control de plagas, y mucho más.
Sin embargo, esas sustancias también conllevan riesgos para la salud y el ambiente, principalmente en poblaciones vulnerables, como mujeres embarazadas y niños, así como ecosistemas frágiles.
De acuerdo con ONU-Medio Ambiente el fortalecimiento de la capacidad institucional consiste en "mejorar la capacidad de las instituciones de forma sostenible en los gobiernos para desarrollar, adoptar, supervisar y hacer cumplir las políticas, la legislación y la regulación, así como obtener acceso a recursos financieros y de otro tipo, para garantizar una gestión racional de los productos químicos y los residuos peligrosos”.
La realización del proyecto da cumplimiento al Convenio de Basilea sobre el Control de los Movimientos Transfronterizos de los Desechos Peligrosos y su Eliminación; la Convención de Rotterdam sobre el Procedimiento de Consentimiento Informado Previo para Ciertos Productos Químicos Peligrosos y Pesticidas en el Comercio Internacional.
Asimismo, la Convención de Estocolmo sobre Contaminantes Orgánicos Persistentes; el Convenio de Minamata sobre el Mercurio y la Iniciativa Enfoque Estratégico para la Gestión Internacional de Químicos.