México.- Una cuenca es un espacio formado por el escurrimiento de un conjunto de ríos, que se encuentra determinado por elevaciones (no necesariamente de gran altitud) que funcionan como parteaguas de estos. Cuidar nuestras cuencas es cuidar nuestros recursos hídricos y nuestro ambiente en general.
Las cuencas y los ecosistemas formados en ellas son de gran relevancia en la promoción y preservación del equilibrio ecológico de las zonas en las que su ubican. Las funciones de regulación ambiental que llevan a cabo permiten mantener en equilibrio a los ecosistemas, así como la interacción de sus recursos, indica la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader).
La dependencia señala que el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (Inifap) trabaja en el planteamiento de estrategias sustentables que promuevan el equilibrio entre el desarrollo de la población, los procesos económicos y la protección del ambiente, y esto requiere tomar en cuenta a las cuencas hidrológicas.
Los resultados han sido bastante positivos en la mayor cordillera de Centroamérica, la Sierra Madre de Chiapas donde se implementa la estrategia para el manejo integral de las cuencas, con el objetivo de reducir el impacto del Cambio Climático en la región.
Derivado de que diversos estudios señalan que la agricultura y los recursos naturales pueden afectarse si no existen medidas de adaptación, integrales y territoriales, que tengan a la comunidad como participante activo, en el proyecto “Manejo Integrado del Paisaje con enfoque de cuencas, como una alternativa para la adaptación al cambio climático”, expertos trabajan con los productores del Grupo Intercomunitario de Acción Territorial (GIAT), en el planteamiento para la apropiación de la cuenca hidrográfica como unidad de planeación y acción para el desarrollo integral.
De la cuenca se obtiene el satisfactor de las necesidades de la población y, a su vez, se impulsa el capital humano y social, con talleres de capacitación, convenios comunitarios e intercomunitarios, mejoramientos de productos agrícolas como maíz y frijol, diagnósticos participativos, pagos por servicios ambientales, monitoreo de la calidad del agua, entre otros.
Por tal razón el manejo integral de cuencas se presenta como una opción viable para aprovechar los beneficios que este espacio geográfico nos provee, en beneficio de la población local, estatal, nacional y mundial
Manejo integral de cuencas, una opción para enfrentar al cambio climático
El manejo integral de cuencas se presenta como una opción viable para aprovechar los beneficios que este espacio geográfico otorga y reducir el impacto del Cambio Climático.
México.- Una cuenca es un espacio formado por el escurrimiento de un conjunto de ríos, que se encuentra determinado por elevaciones (no necesariamente de gran altitud) que funcionan como parteaguas de estos.
Las cuencas y los ecosistemas formados en ellas son de gran relevancia en la promoción y preservación del equilibrio ecológico de las zonas en las que su ubican. Las funciones de regulación ambiental que llevan a cabo permiten mantener en equilibrio a los ecosistemas, así como la interacción de sus recursos, indica la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader).
Cuidar nuestras cuencas es cuidar nuestros recursos hídricos y nuestro ambiente en general. La dependencia señala que el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (Inifap) trabaja en el planteamiento de estrategias sustentables que promuevan el equilibrio entre el desarrollo de la población, los procesos económicos y la protección del ambiente, y esto requiere tomar en cuenta a las cuencas hidrológicas.
Los resultados han sido bastante positivos en la mayor cordillera de Centroamérica, la Sierra Madre de Chiapas donde se implementa la estrategia para el manejo integral de las cuencas, con el objetivo de reducir el impacto del Cambio Climático en la región.
Derivado de que diversos estudios señalan que la agricultura y los recursos naturales pueden afectarse si no existen medidas de adaptación, integrales y territoriales, que tengan a la comunidad como participante activo, en el proyecto “Manejo Integrado del Paisaje con enfoque de cuencas, como una alternativa para la adaptación al cambio climático”, expertos trabajan con los productores del Grupo Intercomunitario de Acción Territorial (GIAT), en el planteamiento para la apropiación de la cuenca hidrográfica como unidad de planeación y acción para el desarrollo integral.
De la cuenca se obtiene el satisfactor de las necesidades de la población y, a su vez, se impulsa el capital humano y social, con talleres de capacitación, convenios comunitarios e intercomunitarios, mejoramientos de productos agrícolas como maíz y frijol, diagnósticos participativos, pagos por servicios ambientales, monitoreo de la calidad del agua, entre otros.
Por tal razón el manejo integral de cuencas se presenta como una opción viable para aprovechar los beneficios que este espacio geográfico nos provee, en beneficio de la población local, estatal, nacional y mundial