México.- Ante el crecimiento acelerado de diversas zonas metropolitanas de México y las recurrentes condiciones de sequía que se registran en el país, especialmente en la zona norte, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) desarrolla proyectos de largo plazo que permiten avanzar hacia la seguridad hídrica de las poblaciones, informó el subdirector general técnico, Humberto Marengo Mogollón.
Al impartir la conferencia “Desabastecimiento de agua en zonas metropolitanas, la planeación ¿es aliada o es ignorada?”, señaló que Conagua implementa acciones sustantivas, muchas de las cuales se trabajan de manera coordinada con instancias de los ámbitos federal, estatal y municipal, así como asociaciones de usuarios, empresas e instituciones del sector privado y social.
En materia de vigilancia y planeación, refirió que, mediante el Servicio Meteorológico Nacional, Conagua monitorea la sequía y emite dictámenes técnicos de corroboración de la ocurrencia de un evento severo por municipio.
Asimismo, la institución forma parte de la Comisión Intersecretarial para la Atención de Sequías e Inundaciones, presidida por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales y donde participan 14 dependencias federales con el fin de dar puntual seguimiento a la situación de la sequía, y, de acuerdo a las atribuciones de cada dependencia, establecer acciones para reducir la vulnerabilidad a nivel municipal.
Adicionalmente, preside el Comité Técnico de Operación de Obras Hidráulicas (CTOOH), un órgano colegiado, integrado por especialistas e investigadores de diferentes dependencias y universidades, en el que se analizan las condiciones meteorológicas e hidrológicas que pudieran incidir en las cuencas de las presas a nivel nacional, y se toman decisiones sobre las medidas de operación de las mismas y de otra infraestructura hidráulica, con el fin de garantizar el derecho humano al agua, privilegiando la protección a la población. Apuntó que en este comité también se deciden los volúmenes por asignar para los 86 distritos de riego del país.
Además de que a nivel federal se cuenta con el Programa Nacional Contra la Sequía, que dota de instrumentos para la prevención, seguimiento y mitigación de la sequía, la Conagua está a cargo de programas enfocados en apoyar a organismos operadores municipales y/o estatales, mediante el financiamiento de obras de infraestructura hidráulica en materia de agua potable, drenaje y saneamiento.
En ese contexto, ante la crisis de agua en la presa Cerro Prieto, de manera inmediata, Conagua apoyó al Gobierno de Nuevo León con el suministro de agua en 16 municipios, así como con la perforación, rehabilitación y mantenimiento de pozos y en la gestión de acuerdos con industrias, el Distrito de Riego 031 Las Lajas y unidades de riego del “Chapotal”, para la aportación temporal de agua. En el mediano plazo, se construye la presa La Libertad y el acueducto El Cuchillo II.
Para el beneficio de la Zona Metropolitana de Guadalajara, se realiza la adecuación de la presa El Zapotillo y se construye el acueducto Zapotillo – El Salto – Calderón.
Con el fin de satisfacer las necesidades hídricas de León, se trabaja en un acuerdo de coordinación con el Gobierno de Guanajuato, para desarrollar un proyecto de recuperación de agua, impulsado con la tecnificación del Distrito de Riego 011 Alto Río Lerma y la construcción de un acueducto para dicho abastecimiento de agua.
En la zona conocida como La Laguna, integrada por regiones de Coahuila y Durango, se implementa el proyecto Agua Saludable para La Laguna, que busca abastecer a la población de agua sin arsénico y que incluye una presa derivadora sobre el cauce del río Nazas y una planta potabilizadora, además de acciones para el mejoramiento de la eficiencia de organismos operadores e infraestructura hidroagrícola para hacer más eficiente el uso del agua.
En tanto, en situaciones de emergencia, mediante la Gerencia de Protección a la Infraestructura y Atención de Emergencias (PIAE), apoya a estados, municipios y usuarios agrícolas para brindar atención por desabasto público/urbano o sequía, y realiza convenios de colaboración para el abasto mediante carros tanque, entre otras acciones emergentes.
Aunado a lo anterior, expuso que es deseable que los tres órdenes de gobierno impulsen la mejora en la medición del consumo de agua a nivel urbano, reducir el uso del agua en actividades no esenciales y las tomas clandestinas, optimizar las políticas de abastecimiento municipales, hacer más eficiente el riego y abasto de agua mediante mejoras a la infraestructura y la implementación de dispositivos más eficientes, promover la reutilización del agua tratada o proveniente del riego y, en lo posible, buscar nuevas fuentes de agua, como la desalinización o el reúso de aguas residuales tratadas.
Finalmente, subrayó que para afrontar las crisis de sequía se requiere la suma de esfuerzos de los sectores gubernamental, académico y social, a fin de establecer mecanismos más robustos de planeación y uso eficiente del agua, pues su cuidado y conservación es una tarea que compete y beneficia a todos.