El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) apoyó al Ministerio de Economías y Finanzas de Uruguay (MEF) a preparar el marco necesario para la emisión de su primer bono soberano cuyo precio está condicionado a indicadores de sustentabilidad.
El 20 de octubre Uruguay emitió el primer bono soberano vinculado a sustentabilidad (SLB, por sus siglas en inglés), que cuenta con un mecanismo de abaratamiento del costo de su deuda (step down) contra cumplimiento de deudas. Lo que el MEF propone es alinear la política de financiamiento soberano del país con sus metas climáticas, mediante la emisión de un bono cuyo cupón está condicionado al cumplimiento de las metas climáticas y ambientales que el país fijó en su primera Contribución Determinada a nivel Nacional (CDN) al Acuerdo de París.
La emisión atrajo a 188 inversores de Europa, Asia, Estados Unidos y Latinoamérica, de los cuales el 21% son nuevos compradores de deuda del país. El país recibió demanda por un total de US$3.960 millones de dólares, un monto ampliamente superior a los US$1.500 millones que decidió emitir. La emisión correspondiente a un diferencial de 170 puntos básicos respecto al bono de referencia del Tesoro de Estados Unidos. El logro de las metas del bono permitirá una reducción del costo de hasta 30 puntos básicos adicionales.
“El diseño de bonos temáticos para alcanzar los objetivos de la agenda 2030 de desarrollo sostenible puede traer importantes beneficios en la gestión de la deuda en la región y esta primera emisión de un bono con step-down es un reconocimiento explícito de los mercados al compromiso de Uruguay”, dijo Matías Bendersky, Representante del BID en Uruguay. “En Uruguay, la emisión de este bono es clave y refleja el compromiso y el trabajo multisectorial de la acción climática que venimos apoyando desde los inicios de la primera transición energética del país”, añadió.
La calificadora de riesgo japonesa R&I subió la nota de la deuda soberana uruguaya en moneda extranjera a BBB+ la semana pasada, con perspectiva estable. De esta manera, Uruguay logra la más alta calificación crediticia en su historia. En su comunicado de prensa, la calificadora mencionó entre los factores que tuvo en cuenta el compromiso estratégico del país con la descarbonización de su economía.
El Grupo BID ya ha apoyado, anteriormente, el desarrollo de mercados verdes y de bonos de sostenibilidad en América Latina y el Caribe. Desde 2007, el BID ha apoyado la primera transición energética de Uruguay, y ahora la segunda.
El BID y el país han acelerado desde 2019 su agenda de colaboración ambiental, con un foco en la acción climática. No obstante, esta es la primera vez que se apoya un bono soberano que contiene indicadores de sustentabilidad. De esta forma el costo financiero del instrumento estará condicionado al cumplimiento o no de las metas de la CDN de Uruguay.
La emisión de este bono supuso un importante esfuerzo multidisciplinario e interministerial, con una participación activa y trabajo conjunto de los Ministerios de Ambiente, de Industria, Energía y Minería, y en coordinación con la Oficina de Planeamiento y Presupuesto de la República, así como con el conjunto de los actores del Sistema Nacional de Respuesta ante el Cambio Climático y variabilidad (SNRCC).