México.- Durante la conferencia matutina encabezada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, el nuevo titular de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) dijo que se recurrirá a especialistas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), que ya manejan el tema de la energía solar y la transición a ecotecnologías.
En su primera aparición pública como titular del cargo, explicó que será un plan gradual, pues “por razones estratégicas hoy en día no puede haber un cambio abrupto porque quedaríamos volando”, pero que el presidente tiene claro que “esa transición se tiene que hacer tarde o temprano, y hay que trabajar en esa línea”.
Reconoció que hay un cambio en todo el mundo para pasar de la base de combustibles fósiles como el petróleo, el gas; el uranio para las plantas nucleares, “a nueva civilización solar (que) es algo que está (ocurriendo) en todo el mundo, no nada más en México”.
“El petróleo llegará a su fin, la mitad de los países hoy en día ya están usando su última parte de petróleo en todo el mundo, en 2050 se acaba el petróleo y le van a seguir el gas, el carbón y el uranio”, por lo que comentó al presidente: “necesitaríamos, Andrés Manuel, armar todo un plan nacional de transición energética muy bien pensado”.
El cambio climático, que no se ha detenido a pesar de las advertencias de los científicos desde hace dos décadas, generará catástrofes de todo tipo y los alimentos que serán necesarios tendrán que generarse bajo métodos agroecológicos.
En este sentido, llamó la atención en que ahora las miradas están puestas “en lo que pasará de aquí a un año clave, el 2050, sólo 30 años”, fecha en que la humanidad alcanzará nueve mil millones de habitantes, es decir, dos mil millones más en tres décadas.
“El cambio climático, que no se ha detenido a pesar de las advertencias de los científicos desde hace dos décadas, generará catástrofes de todo tipo y los alimentos que serán necesarios tendrán que generarse bajo métodos agroecológicos y no más bajo las pautas insanas y destructivas de la llamada agricultura moderna o industrial”, afirmó.
Explicó que “la perspectiva de la conciencia ecológica, la habitual geometría política de izquierdas y derechas desaparece para ser reemplazada por una nueva disyuntiva; no hay más que políticas por la vida y políticas contra la vida o políticas hacia la muerte”.
Esto “se traduce en políticas que enfrían el clima del planeta y políticas que lo calientan. Cada vez vamos a ir más y más, conforme pasa el tiempo, vamos a ir cada vez más definiendo todo esto en términos de lo que sucede con el cambio climático”.
Por ello, llamó a defender la vida o “la continuamos aniquilando en nombre del mercado, la tecnología, el progreso, el desarrollo, el crecimiento económico y un largo etcétera”.