México.- El resultado de las investigaciones para determinar la causa de la muerte de aves marinas en el litoral del Pacífico, como parte del operativo implementado por las secretarías de Agricultura y Desarrollo Rural y de Medio Ambiente y Recursos Naturales, permiten descartar la presencia de enfermedad de New Castle e influenza aviar de alta patogenicidad AH5N1, conocida también como gripe aviar.
El Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) informó que continúa la recolección de muestras de tejidos, sin embargo, de acuerdo con los hallazgos patológicos encontrados en las necropsias realizadas por veterinarios y biólogos especialistas, se considera que los animales murieron de inanición.
Explicó que la causa más probable de este evento epidemiológico es el calentamiento de las aguas del océano Pacífico, por los efectos del fenómeno meteorológico de El Niño, lo que provoca que los peces bajen a la profundidad en busca de aguas más frías, hecho que impide a las aves marinas cazar su alimento.
En el operativo de emergencia participan más de 15 médicos veterinarios y biólogos oficiales de la Comisión México-Estados Unidos para la Prevención de la Fiebre Aftosa y otras Enfermedades Exóticas de los Animales (CPA) de la Dirección General de Salud Animal (DGSA) de los estados de Chiapas, Oaxaca, Guerrero, Michoacán, Jalisco, Colima, Nayarit, Sinaloa, Sonora, Baja California y Baja California Sur, y personal de diversas instituciones federales, estatales, municipales y académicas que han brindado apoyo para realizar el diagnóstico situacional.
Los médicos de la DGSA del Senasica trabajan en colaboración con especialistas de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) de la Secretaría de Medio Ambiente.
Las muestras biológicas que recolectan los especialistas se envían para su análisis al Centro Nacional de Referencia para el Diagnóstico e Investigación de Enfermedades Exóticas y Emergentes de los Animales de la CPA, que incluye laboratorios de alta seguridad nivel tres.
Posteriormente, se derivan a otras instalaciones del Senasica, como el Centro Nacional de Servicios de Diagnóstico en Salud Animal (Cenasa) y, de ser necesario, al Centro Nacional de Referencia en Parasitología Animal y Tecnología Analítica (Cenapa), para realizar pruebas complementarias que permitan detectar la presencia de otras enfermedades infecciosas o tóxicos que pudieran estar presentes.
El organismo de la Secretaría de Agricultura explicó que la investigación ha revelado que más del 90 por ciento de los animales afectados son pardelas de dorso gris (Ardenna grisea), aunque se han encontrado también otras especies endémicas como gaviotas y pelícanos.
Las pardelas de dorso gris son aves pelágicas, es decir, suelen vivir en alta mar y reproducirse en islas, rara vez llegan a superficie continental, pueden volar hasta 500 kilómetros diarios, por lo cual requieren de altas cantidades de alimento para sobrevivir y, en este momento, no encuentran en la superficie del mar suficientes peces para cubrir sus necesidades energéticas, detalló.
La evidencia epidemiológica demuestra que las aves mueren en el océano y llegan a las costas arrastradas por las corrientes marítimas, anotó el Senasica.
Destacó que este fenómeno ha sucedido en otras latitudes del mundo cuando se presenta el evento climático de El Niño y, de hecho, también se han reportado muertes de aves marinas en Perú y Chile.
Ante la alerta sanitaria, las instancias del Gobierno de México reiteran al público en general que cuando detecten alta mortalidad de aves reporten el hallazgo a las autoridades sanitarias de Agricultura al teléfono de emergencias 800 751 2100, disponible las 24 horas del día los 365 días del año, o a través de la aplicación Avise del Senasica.
Las investigaciones continuarán de manera coordinada entre los técnicos de las secretarías de Agricultura y de Medio Ambiente, con el fin de preservar la vida de la fauna silvestre y proteger el patrimonio agropecuario nacional.