Bruselas.- Investigadores de 14 países tomaron muestras de ADN de 12 especies de árboles de toda Europa con el objetivo de ayudar a comprender el vínculo entre la diversidad genética y una mayor adaptación y resiliencia de los bosques al cambio climático.
La deforestación, el calentamiento global, las plagas invasivas y las nuevas enfermedades, están amenazando a muchos árboles en el continente, por ello silvicultores, conservacionistas y científicos realizan esfuerzos para salvarlos.
El proyecto llamado GenTree se desarrolló por cuatro años y varios millones de dólares en recursos invertidos en la documentación de la diversidad genética, la cual servirá como base de datos valiosos para administradores forestales e investigadores.
Los resultados de la toma de muestras podrían ser una base sólida para una mejor comprensión de la relación entre la biodiversidad y la resiliencia de los bosques europeos.
Cabe destacar que en la Unión Europea más del 42 por ciento de la superficie terrestre está cubierta por tierras boscosas que brindan servicios de madera, alimentos, energía y ecosistemas, agua limpia y control de inundaciones.
"Es el primer proyecto que considera la diversidad genética no solo desde el lado de la reproducción, sino también desde el de la conservación", señaló el líder del proyecto Bruno Fady, genetista forestal del Instituto Nacional de Investigación Agrícola de Francia.
Se analizaron 12 especies de árboles diferentes de las que se tomaron muestras de 10 a 25 poblaciones que sobrevivieron en lugares que registran condiciones ambientales extremas, como sequías o heladas.
Los resultados de los datos ayudan a revelar cómo los árboles hacen frente a sus entornos locales y pueden ser útiles para los investigadores que ayudan a los bosques a sobrevivir al cambio climático.