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Cochabamba (Bolivia).- La iniciativa de ir usar la bicicleta y recibir un pago adicional comenzó en abril de este año en Cochabamba, cuando de manera voluntaria casi la mitad de los trabajadores de esa organización no gubernamental cambiaron los autos o las motos por una bicicleta para llegar a su espacio laboral y moverse por esta ciudad, una de las más grandes de Bolivia.
"Teníamos que dar un paso más allá, una cosa es promover, una cosa es hablar y otra es hacer, y desde ese punto de vista hemos empezado a usar la bicicleta", expresó a el director de Energética, Miguel Fernández.
Al menos 12 trabajadores de los 25 reciben este pago adicional, que equivale al monto que gastarían en el uso del transporte público de la ciudad, que es cerca del 4 por ciento, unos 12 dólares, del salario mínimo nacional en Bolivia, de unos 304 dólares, comentó el director.
"No parece mucho, pero es significativo porque es una iniciativa que de todas maneras tiene un impacto financiero en la institución, pero que está dispuesto a correrlo en pro de mejorar el medio ambiente de Cochabamba", manifestó Fernández.
Cada empleado recorre de unos cinco a siete kilómetros en bicicleta para llegar a su puesto de trabajo, lo que evita el uso de al menos unos diez litros de gasolina y la contaminación consiguiente.
Cochabamba es considerada la ciudad más contaminada del país y actualmente el aire es catalogado como "regular", pues por ahora está por debajo del límite permitido en Bolivia de 150 miligramos por metro cúbico o mg/m3, un valor para medir la concentración de una sustancia en la atmósfera.
Sin embargo, está por encima de lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), de 50 mg/m3, según informó el responsable de la red de Monitoreo de Calidad del Aire (MoniCa), Alain Terán.
Al menos el 90 por ciento de la contaminación del aire es atribuible al parque automotor existente en Cochabamba, indicó sobre esta urbe con cerca de 700 mil habitantes situada a un promedio de 2 mil 570 metros de altura.
Los trabajadores de Energética demuestran todos los días su compromiso con esta iniciativa por el medio ambiente cuando asumen algunos "riesgos" que implica el ir en bicicleta entre los autos y avenidas donde no hay ciclovías.
"Nos chocan, a veces los autos nos golpean o nos insultan, pero hay que ser firmes", enfatizó Rocío Fernández, que trabaja desde hace dos años en esa organización no gubernamental.
Desde que empezó a moverse en bicicleta, su compañero Jorge Terrazas señaló por su parte que tarda menos en trasladarse de un lugar a otro y se acostumbró a hacer este ejercicio que le da más energía.
"Las demás empresas deberían unirse y aportar su grano de arena transportándose en bicicleta", declaró.
De la misma forma, Marcelo Tórrez se unió a este proyecto para hacer un cambio que es "absolutamente necesario para el medio ambiente", que demuestra una "actitud responsable" que todas las personas en algún momento deben asumir.
Además de esta iniciativa, Energética, que trabaja en proyectos con energías renovables, también asume otras medidas en su oficina para generar menor contaminación y ser responsables con el medio ambiente.
Por ejemplo el 70 por ciento de toda la energía que consume proviene de paneles solares que están en el techo de la oficina hace ya diez años, además de medidas para bajar el consumo de agua y de papel.
También cuentan con dos bicicletas eléctricas para que su personal se mueva largas distancias y trabajan en generar un auto eléctrico que movilice a más de dos personas.
"Si queremos bajar las emisiones de gases que contaminen, tenemos que trabajar en medidas de transporte urbano sostenible, porque ahí está el gran desafío", finalizó el director.