Madrid.- España, Italia y Alemania han invertido más de 4 mil millones de euros (más de 4 mil 500 millones de dólares al cambio actual) entre 2018 y 2021 en la protección del abastecimiento de combustibles fósiles con misiones militares de la Unión Europea (UE), según una investigación de la organización ecologista Greenpeace.
De acuerdo con Greenpeace España, Greenpeace Italia y Greenpeace Alemania, que han elaborado el estudio en sus respectivos países, casi dos tercios de las misiones militares de la Unión Europea vigilan y aseguran la producción y el transporte de petróleo y gas a Europa, indica un comunicado de la ong desde Bruselas.
Solo en 2021 Italia ha gastado en inversiones militares para asegurar combustibles fósiles como el petróleo y el gas 797 millones de euros (más de 900 millones de dólares), seguida de España con 274 millones de euros (310 millones de dólares) y Alemania con 161 millones de euros (182 millones de dólares).
Es la primera vez que un estudio examina las misiones militares de la UE y la OTAN durante este periodo y en él se han analizado documentos públicos y declaraciones de líderes políticos para calcular los costes de España, Italia y Alemania.
Los gobiernos y la UE deben poner fin a este círculo vicioso y redirigir el dinero hacia la descarbonización de la economía y la transición energética justa", ha asegurado el responsable de la campaña de Paz de Greenpeace España, Javier García Raboso.
La UE depende energéticamente de la importación de combustibles fósiles de regiones políticamente inestables, con casi el 90% de petróleo y el 70% del gas natural, de ahí que la Unión depende de la estabilidad política de los países proveedores y de la seguridad en las rutas comerciales de suministro, una situación que intenta asegurar mediante la fuerza militar.
Según Greenpeace, los consumidores pagan una triple factura por la energía fósil: los costes militares se suman a los elevados precios de la energía y a los daños de una crisis climática que se agrava.
Este año, los gobiernos de la UE han desplegado soldados y equipos militares en respuesta a emergencias tales como las severas inundaciones en Alemania, la borrasca Filomena en España o los grandes incendios en el sur de Italia.
Este informe muestra que al mismo tiempo se enviaron más soldados y se invirtieron millones de euros para proporcionar seguridad a los barcos cargados de petróleo y gas, combustibles fósiles que continuarán agravando la crisis climática que ya ha causado tanta devastación, según Raboso.
El documento señala cómo "la codicia" por el petróleo ha llevado a Europa a desarrollar todo un sistema armamentístico para proteger el crudo y el gas a expensas de las personas y el planeta, ha asegurado la responsable de la campaña de clima y energía de Greenpeace para la UE y principal organizadora de la Iniciativa Ciudadana Europea, Silvia Pastoreli.
Esta iniciativa pretende introducir una ley que prohíba la publicidad y el patrocinio de los combustibles fósiles en la UE y, según la ong, si se logra un millón de firmas de ciudadanos para la petición, la Comisión Europea tendrá que considerar la presentación de una nueva ley.
Por otra parte, la OTAN ha invertido 33 mil millones de euros entre 2018 y 2020 (más de 37 mil 300 millones de dólares al cambio actual).
Esta cifra incluye la misión internacional contra el Estado Islámico en Irak (Coalición Global contra el Daesh) para asegurar los depósitos de petróleo y gas.
Para los próximos diez años, según Greenpace, la OTAN prevé una mayor competencia por unos recursos energéticos menguantes y quiere ampliar aún más la protección de las infraestructuras críticas.