Londres.- Los combustibles más ecológicos y con bajas emisiones pronto podrían ser la norma en el Reino Unido, ya que el gobierno consulta sobre los planes para introducir E10, una mezcla de gasolina y biocombustibles que ya se utiliza en otros países de Europa.
Compuesto por un 10 por ciento de etanol, un anuncio del Secretario de Transporte, Grant Schapps, afirma que el cambio de combustible podría tener el mismo impacto en las emisiones de dióxido de carbono (CO2) que sacar 350 mil automóviles de circulación.
La introducción de esta mezcla de combustible sería un paso intermedio para el Reino Unido, donde se hacen planes para prohibir la venta de nuevos automóviles de gasolina y diesel en los próximos 15 años, como parte de un movimiento para descarbonizar el transporte.
“Antes de que los autos eléctricos se conviertan en la norma, queremos aprovechar las reducidas emisiones de CO2 hoy; este pequeño cambio a gasolina que contiene bioetanol al 10 por ciento ayudará a los conductores de todo el país a reducir el impacto ambiental de cada viaje”, dijo Schapps.
El bioetanol es una forma de alcohol que se puede producir a partir de cultivos como el trigo, el sorgo, la caña o el maíz. Es la forma de biocombustible más utilizada en el mundo. Al igual que las cervezas y los vinos, los cultivos se fermentan junto con microorganismos que comen azúcares y almidones y los convierten en alcohol.
Los defensores del ambiente también señalan el potencial de los cultivos utilizados para capturar CO2 y compensar las emisiones a la atmósfera.
Rodeado por el océano, hay otra fuente posible para alimentar la evolución del combustible en el Reino Unido: las algas marinas, naturalmente altas en los azúcares necesarios para producir alcohol y puede fermentarse fácilmente para producir biocombustibles.
El cultivo de algas no requiere tierra, agua dulce o fertilizantes, lo que hace que su impacto ambiental potencial sea mínimo, dice la Asociación Escocesa de Ciencias del Mar, que actualmente investiga la posibilidad de usarlo como fuente de combustible verde.
En Europa, varios países han utilizado la mezcla E10 durante años. El combustible se introdujo en Francia en 2009, donde ha demostrado ser una opción popular entre los automovilistas franceses, gracias a las exenciones de impuestos.
Otros países que han adoptado E10 son Alemania, Bélgica y Finlandia, impulsados por los objetivos de la Unión Europea para impulsar las fuentes de combustible renovables.
Por otra parte, Brasil es el mayor usuario mundial de biocombustibles y el segundo mayor productor que mezcla su gasolina con hasta un 27 por ciento de etanol.
La mayoría de los automóviles modernos pueden manejar hasta el 10 por ciento de contenido de etanol propuesto por el Gobierno del Reino Unido, pero los automóviles nuevos en el país sudamericano han sido completamente flexibles desde 2003, lo que significa que pueden funcionar con un combustible hecho de cualquier cosa y hasta 100 por ciento de etanol.