Berlín.- Tomar café es una de las actividades que se ha vuelto muy popular en todo el mundo pero, ¿dónde terminan los granos de ese producto después de su elaboración?; esa fue una de las cuestiones que llevaron a un joven alemán a crear nuevos productos como tazas que se pueden usar una y otra vez.
El café reciclado y materias primas renovables dieron origen al “Kaffeeform”, una fórmula diseñada por Julian Lechner, quien recolecta primero las sobras en los cafés locales en Berlín y después las combina con pegamentos naturales y partículas de madera de fuentes sostenibles para producir un líquido que se puede moldear por inyección para crear tazas reutilizables.
La idea surgió después de tres años de experimentar y mantener discusiones con expertos y científicos; en 2015 lanzó la primera taza y un año después una copa para café. Sus productos tienen apariencia de madera marmolada oscura, olor a café, son livianas, lavables y duraderas.
”Como el consumo mundial de café está creciendo constantemente, los granos después de su elaboración estarán disponibles en masa. Utilizamos estos recursos desperdiciados para crear una alternativa sostenible y ecológica”, destacó Lechner.
De acuerdo con su página web, el proyecto “fue ganador del premio de diseño de producto Red Dot 2018 por su impacto social e innovador sistema de recuperación”.
Señala que con su idea “quiere remodelar los hábitos del consumidor. Ofrecer opciones e inspirar a las personas a integrar la sostenibilidad en su vida cotidiana y tomar decisiones conscientes”.