México.- La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), en coordinación con la Secretaría de Marina Armada de México (Semar), la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (Conapesca), la Policía Federal, División Gendarmería Ambiental, y la Fiscalía General de la República (FGR), atienden el inicio de la temporada de pesca de camarón en las aguas marinas del Alto Golfo de California.
El 24 de septiembre se levantó la veda temporal para todas las especies de camarón de los sistemas lagunarios estuarinos, marismas y bahías ubicados en Sinaloa, Nayarit, Colima, Jalisco y la zona del Alto Golfo de California.
Las citadas dependencias federales realizaron un operativo de inspección y vigilancia para preservar las especies marinas protegidas de la parte Norte del Golfo, con especial énfasis en la Vaquita Marina y la Totoaba.
Al respecto, los 14 inspectores federales de Profepa, ubicados en las dos bases de operación en San Felipe, Baja California y Puerto Peñasco, Sonora, en coordinación con las demás autoridades, llevan a cabo recorridos constantes de vigilancia marítima, y terrestre; establecen puntos de observación, colocan filtros y revisan embarcaciones en muelles, rampas y bajaderos cubriendo por mar y tierra la zona del Alto Golfo de California –desde Bahía de los Ángeles, B.C., al norte de San Felipe, y el desemboque desde Santa Clara hasta Puerto Peñasco, Sonora–¬.
El propósito de dicha actividad es verificar que estás últimas cuenten con su documentación en regla, que las faenas pesqueras sean realizadas con las artes de pesca autorizadas, y que no afecten a las especies consideradas en riesgo.
Así mismo, en coordinación con Organizaciones No Gubernamentales, se continúan con las labores de recuperación de redes perdidas, abandonadas o las llamadas “fantasma”.
De manera paralela, se trabaja con la Conapesca en la publicación de un próximo nuevo Acuerdo de restricción de actividades en la zona, que garantice la sustentabilidad y productividad de la región.
Cabe resaltar que en fechas próximas, las autoridades federales trasladarán a la zona más de 600 efectivos, entre marinos, policías, oficiales de pesca e inspectores, para atender la corrida alimenticia de la Totoaba y garantizar que el polígono de la Vaquita Marina quede totalmente blindado y se aplique un programa de tolerancia cero.