México.- El suelo está lleno de agua, nutrientes y microorganismos esenciales para la producción de alimentos, sin embargo, restaurar unos pocos centímetros puede llevar hasta mil años, destacó la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en su portal de Internet.
Cada cinco segundos se erosiona una superficie de suelo equivalente a un campo de futbol, y aunque se trata de un fenómeno natural por la remoción de la capa superficial del agua o el viento, se agudiza con actividades humanas como el sobrepastoreo, la agricultura intensiva o la deforestación.
El tema será analizado durante el Simposio Mundial sobre la Erosión del Suelo (GSER19), una reunión científico-normativa que se llevará a cabo del 15 al 17 de mayo en la sede de la FAO en Roma, Italia.
El organismo enumeró algunas acciones que amenazan la seguridad alimentaria. Planteó que la erosión del suelo puede reducir el rendimiento agrícola hasta en un 50 por ciento, con lo que los cultivos tienden a ser de menor calidad, es decir, más pequeños y menos nutritivos.
Además, al registrarse la remoción de capas de tierra se produce la pérdida de minerales y nutrientes del suelo lo que deriva en la degradación de los ecosistemas, y eso puede aumentar la frecuencia e intensidad de desastres naturales como deslizamientos de tierra e inundaciones.
De igual forma, destacó que este fenómeno afecta la dinámica del agua, ya que cuando el suelo se erosiona transita menos líquido y el agua potable puede disminuir, además impide la absorción de las lluvias, por lo que las inundaciones pueden darse con más frecuencia.
Otros de los riesgos es el daño a las infraestructuras urbanas y producciones agrícolas debido a que el suelo suelto y erosionado puede hacer que las inundaciones, los deslizamientos de tierra y los vientos huracanados sean más intensos.
A medida que el agotamiento del suelo se agrava, los medios de subsistencia de la población también se ven afectados y esa condición los obliga a desplazarse a otro lugar, lo que se relaciona con situaciones de pobreza y migración sin control.
El organismo refirió que más de 68 millones de personas se han visto desplazadas de sus hogares en todo el mundo, muchas de ellas por cuestiones relacionadas con el clima.