Ciudad de México. La Representación del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) en México y la compañía Coca-Cola firmaron un convenio de colaboración que permitirá el desarrollo de capacidades en innovación de los actores estratégicos del sector agroalimentario de este país.
El convenio, suscrito por el Director de Asuntos Públicos de Coca-Cola, Willian Hidalgo, y la Representante del IICA en México, Gloria Abraham, busca hacer uso de la ciencia en los procesos de toma de decisiones para así contribuir en la solución integral de problemas y garantizar la ejecución de iniciativas ambientales en el agro.
“La innovación es una gran oportunidad en los objetivos de producción y ayuda a la sustentabilidad, a tener mejores prácticas en la productividad y en el campo”, señaló Hidalgo.
El acuerdo, además, pretende promocionar proyectos que favorezcan la reducción de la huella de carbono en todas las etapas de la cadena de valor, la conservación del agua a nivel operativo, y el establecimiento de programas para el manejo de desechos.
Coca-Cola es miembro de la Red de Gestión de la Innovación del Sector Agroalimentario (Red INNOVAGRO), cuya secretaría ejecutiva está a cargo del IICA, y, es través de esta, que se desarrollarán los proyectos que formen parte del convenio. La Red también pondrá al alcance de Coca-Cola la información, conocimiento y experiencias generadas por sus miembros en gestión de la innovación y facilitará la difusión.
Además, mediante la alianza se generarán espacios de intercambio, transferencia y desarrollo de iniciativas conjuntas entre los miembros de la Red, potenciando los recursos humanos, técnicos, el conocimiento disponible y la experiencia de sus miembros.
La compañía estadounidense se dedica a producir y comercializar una amplia gama de bebidas carbonatadas, aguas, tés, jugos, café, bebidas energéticas, lácteos y bebidas a base de proteína vegetal, y busca incorporar la sostenibilidad en toda su cadena de producción para crear valor económico, social y ambiental.
En el proceso de elaboración de sus bebidas, utiliza suministros, materias primas y fuentes de energía para garantizar una producción adecuada y eficiente, implementando prácticas de producción sostenibles e iniciativas de recolección post consumo.