Chiapas.- La Secretaría de Medio Ambiente e Historia Natural (Semahn), a través del Departamento de Ingeniería Ambiental, realiza actividades y estudios ambientales con ayuda de herramientas tecnológicas, las cuales brindan múltiples ventajas en el cuidado de los ecosistemas.
Desde el 2021, la Semahn incorporó en sus procedimientos el uso de drones para llevar a cabo el análisis de sitios de disposición final de residuos sólidos urbanos y bancos de extracción de materiales pétreos, la medición de impactos ambientales, el avance de la mancha urbana cerca de las áreas naturales protegidas, entre otros.
En el pasado, las ortofotos o las imágenes satelitales fueron de gran apoyo para crear un bosquejo del cambio que ha sufrido un ecosistema a lo largo de la historia; sin embargo, no son de gran utilidad para analizar una acción o impacto reciente, ya que las imágenes están desfasadas por años o meses y un sitio puede cambiar drásticamente en un lapso muy corto, lo cual puede significar desaciertos al momento de tomar decisiones.
Actualmente el uso de drones brinda múltiples ventajas a la hora de realizar diagnósticos en campo, ya que a través de videos que demuestren un ecosistema o actividad en tiempo real, algo más complejo como la sobreposición de fotografías que permitan un análisis más fino, o bien, a través de un software de última generación que genere información cuantitativa sobre superficies afectadas o volúmenes de materiales utilizados, es posible acceder a sitios accidentados o identificar aspectos que a simple vista, durante un recorrido, serían difíciles de observar.
Por ello, el personal de la Semahn continúa capacitándose de manera práctica en el uso de estas herramientas tecnológicas que aunque parecen sencillas requieren pericia, conocimiento y acatar normas para el manejo seguro de las mismas, que a su vez permitirán generar información y estrategias para la conservación de los recursos naturales.
El avance tecnológico ha ganado terreno en todo tipo de actividades, para los encargados del cuidado del medio ambiente no ha sido la excepción, pues el uso de drones y teléfonos de gama media-alta se han convertido desde hace unos años en una herramienta básica para el análisis y diagnóstico de la naturaleza, así como de las actividades que pueden generar un impacto en la misma.