La incidencia de inundaciones costeras de 100 años, eventos extremos con un 1% de probabilidad de ocurrir en un año determinado, se prevé que aumente significativamente hacia finales de este siglo. Incluso en un escenario moderado con picos de emisiones de dióxido de carbono en 2040, la mayoría de las comunidades costeras sufrirán estas inundaciones cada 100 años, según un reciente estudio.
El estudio se publicó en Earth's Future, la revista de la AGU dedicada a la investigación interdisciplinar sobre el pasado, presente y futuro de nuestro planeta y sus habitantes.
Además, para 2050, se estima que regiones de todo el mundo podrían enfrentar estas inundaciones de 100 años cada nueve o quince años en promedio.
Un "cambio de paradigma" en las inundaciones costeras
El estudio, dirigido por Hamed Moftakhari, ingeniero civil y profesor de la Universidad de Alabama, subraya que las tendencias históricas ya no ofrecen una perspectiva precisa de las futuras inundaciones. Moftakhari enfatiza que el umbral de inundaciones de 100 años se superará con mayor frecuencia en un clima más cálido, alterando la noción de estos fenómenos como sucesos centenarios.
La investigación fue publicada en Earth's Future, la revista de la AGU dedicada a la investigación interdisciplinaria sobre nuestro planeta y sus habitantes.
Aumento del nivel del mar: un factor crucial
El estudio se centra en un componente crucial que contribuye a las inundaciones a largo plazo: el aumento del nivel del mar. A medida que este nivel se eleve, las infraestructuras costeras estarán más expuestas al agua, aumentando las probabilidades de que tormentas, mareas y olas afecten a las comunidades. Los investigadores utilizaron datos de más de 300 mareógrafos de todo el mundo para estimar los futuros niveles extremos del mar en diferentes escenarios de emisiones de carbono.
Moftakhari advierte que la estacionariedad, suposición de que los patrones históricos se mantendrán, ya no es aplicable para predecir inundaciones costeras. Esto exige una revisión y actualización de las herramientas y prácticas de diseño, así como una planificación proactiva en la ordenación del territorio y el desarrollo urbano. Una gestión proactiva y medidas de protección costera pueden ayudar a las comunidades a reducir los riesgos y afrontar los desafíos que plantea el cambio climático.
El aumento del nivel del mar no afectará a todas las regiones por igual. Mientras las latitudes más altas podrían experimentar descensos debido al deshielo de las capas de hielo, en áreas como el Golfo de México, el nivel del mar está aumentando a un ritmo más acelerado debido al hundimiento gradual de la tierra. Moftakhari destaca la necesidad de soluciones adaptadas a las circunstancias locales para garantizar la resistencia de las comunidades costeras.
Moftakhari concluye con un mensaje de optimismo, recordando que las catástrofes resultan de las decisiones humanas y que el avance tecnológico puede mejorar la resistencia de las comunidades frente a estos desafíos. El cambio climático representa un llamado a la acción urgente para abordar el riesgo creciente de inundaciones costeras, y la adopción de medidas efectivas puede ayudar a construir un futuro más seguro para las comunidades afectadas.