Ciudad de México.- Un reporte de publicación reciente de la Coalición por la Transformación Urbana señala que, para acelerar la recuperación tras la pandemia de la COVID-19, lograr la prosperidad conjunta e impulsar la acción climática, los gobiernos nacionales, incluido el gobierno de México, deben invertir en las ciudades para acelerar de manera significativa su descarbonización y fortalecer su resiliencia.
El reporte El aprovechamiento de la oportunidad urbana: Cómo se pueden recuperar los gobiernos nacionales de la COVID-19, hacer frente a la crisis climática y garantizar la prosperidad compartida a través de las ciudades indica que una implementación exitosa de sus soluciones podría resultar en una reducción del 87% en las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) de las ciudades mexicanas para 2050, en retornos económicos por 210 mil millones de dólares también para 2050, y en 500 mil nuevos empleos para 2030.
El informe de la Coalición destaca el papel vital de las ciudades como motores de las economías nacionales y de los medios de subsistencia de sus habitantes, y aclara que las ciudades no pueden cumplir con esas funciones por sí mismas: los gobiernos nacionales tienen la clave para la transformación urbana dada su escala, acceso a recursos y control sobre muchos ámbitos de la política.
Según investigaciones anteriores de la Coalición, los gobiernos locales son los principales responsables de menos de un tercio del potencial de reducción de emisiones urbanas, y los gobiernos nacionales o de otros niveles superiores son los principales responsables de las medidas que se requieren para lograr dos tercios del potencial global de reducción de emisiones urbanas.
El cambio a un modelo urbano sustentable es factible, utilizando tecnologías que ya existen en la actualidad
Adriana Lobo, directora ejecutiva del Instituto de Recursos Mundiales México (WRI México, por sus siglas en inglés), indicó durante el lanzamiento del reporte en México que las ciudades son una piedra angular en la lucha contra el cambio climático y para el cumplimiento de los objetivos del Acuerdo de París.
“En México, los impactos del cambio climático se notarán de forma muy acusada. Además, sus consecuencias afectarán de forma desproporcionada a los grupos más vulnerables. El cambio a un modelo urbano sustentable es factible, utilizando tecnologías que ya existen en la actualidad. Invertir hoy en el cambio implica menores costos mañana”, dijo Lobo durante la apertura del evento.
Pablo Lazo, director de desarrollo urbano y accesibilidad de WRI México, habló de la gran importancia que tienen las ciudades tanto en términos económicos, tanto en los esfuerzos para la reducción de emisiones.
“Las ciudades están al centro del desarrollo de México, ya que el 80% de su población se encuentra en las ciudades, y casi el 90% del valor añadido bruto (VAB) se produce en áreas urbanas”, dijo Lazo.
“Sin embargo, las ciudades y servicios urbanos no han impacto lo suficiente como para mejorar el nivel de vida de muchas personas. Las ciudades deberán ser la clave para minimizar este desequilibrio y también de cara a la emergencia climática”, agregó.
Incluso antes de la pandemia, más de una cuarta parte de los trabajadores mexicanos eran parte del sector informal, y la mayoría no podía acceder a programas sociales clave. México también enfrenta una importante expansión urbana, la cual genera patrones de movilidad costosos e insostenibles y enfrenta riesgos crecientes relacionados con el cambio climático.
El reporte destaca numerosas oportunidades de acción para México, que incluyen:
- Apoyar la creación de autoridades metropolitanas para posibilitar la planificación integrada del uso del suelo y el transporte.
- Ampliar la oferta de viviendas sociales urbanas bien ubicadas que sean adecuadas, seguras y asequibles, complementadas con opciones de transporte público inclusivas y resilientes.
- Priorizar una transición justa hacia ciudades con cero emisiones netas de carbono, en la que se preste especial atención a las necesidades de las personas pobres y marginadas.
- Incrementar el apoyo a programas que fomenten la producción social de vivienda y hábitat, y aprovechar estrategias bajas en emisiones de carbono para reducir la pobreza.
El informe llega en momentos que la forma en que las personas viven en las ciudades ha sido impactada por la pandemia, por lo que el documento subraya que este es el momento de repensar los roles de las ciudades y de invertir en su recuperación.
Sobre este punto, Corin Robertson, Embajadora del Reino Unido en México, dijo que espera que las ciudades mexicanas se comprometan a la iniciativa “Race to Zero” para contribuir a un futuro sin emisiones.
Román Meyer, Titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), afirmó que la planeación es el elemento central para reducir las brechas de desigualdad socioeconómica, y añadió que desde el gobierno federal se busca reforzar el tema de la planeación territorial mediante proyectos regionales.
"También tenemos estrategias vinculadas en materia de movilidad, tenemos una estrategia de movilidad sustentable que impulsamos con gobiernos locales, como Guadalajara y León, también otros mucho más barriales, como el programa de mejoramiento urbano”, añadió el Secretario.
Sobre las acciones que se realizan a nivel subnacional, María Isabel Ortiz Mantilla, Titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Ordenamiento Territorial del Estado de Guanajuato, habló, por ejemplo, sobre los sistemas de captación de agua de lluvia con enfoque de potabilización y de los calentadores sociales para vivienda que impulsan en el estado, los cuales relacionó con el acceso al agua, la mitigación en materia energética y la justicia social.
La también Presidenta de la ANAAE coincidió con que uno de los grandes retos es lograr que el reordenamiento del territorio sea sustentable.
Realizado de cara a la COP26 que se celebrará a finales de este año en Glasgow y financiado por el Departamento de Energía y Estrategia Industrial del Gobierno Británico (BEIS), este reporte aborda las oportunidades existentes para acelerar la acción climática en seis economías emergentes: China, India, Indonesia, México, Brasil y Sudáfrica.
Su lanzamiento en México también contó con la participación de Javier Garduño, Titular de Planeación y Desarrollo Institucional en SEDATU; Joseluis Samaniego, Director de la División de Desarrollo Sustentable y Asentamientos Humanos de la CEPAL; Luis Carlos Lara Damken, Presidente de la AMIMP y Director General del IMPLAN Ahome y de Mariuz Calvet, Directora de Sustentabilidad e Inversión Responsable del Grupo Financiero Banorte.
México es uno de los cuatro países, junto a Tanzania, China y Ghana, en los que la Coalición lleva trabajando desde el 2016 en temáticas para el desarrollo urbano y las ciudades.
La Coalición busca generar un entorno de cooperación con los gobiernos de los países miembros para conjuntamente construir políticas nacionales -y sus vínculos con acciones a nivel estatal y municipal- que conlleven a generar desarrollo económico y la transformación de las ciudades de cara a la emergencia climática.
Puedes consultar el reporte "El aprovechamiento de la oportunidad urbana: Cómo se pueden recuperar los gobiernos nacionales de la COVID-19, hacer frente a la crisis climática y garantizar la prosperidad compartida a través de las ciudades" aquí.