El estudio más reciente sobre el estado de las emisiones de compuestos orgánicos volátiles (COV), uno de los principales precursores de ozono (O₃), ha avanzado con la finalidad de identificar los principales emisores y definir medidas de mitigación sobre las fuentes, indican las “Estrategias integradas en contaminantes climáticos de vida corta para mejorar la calidad del aire y reducir el impacto al cambio climático”.
Este instrumento describe acciones concretas de México para reducir el carbono negro, el metano y los hidrofluorocarbonos de las principales fuentes de emisión identificadas por México.
En 2017 se desarrolló un “Reporte nacional de emisiones de compuestos orgánicos volátiles” INECC-PNUD (2017), con un enfoque especial sobre los precursores de origen orgánico, año base 2014, con resolución espacial municipal.
De acuerdo con este documento las principales fuentes de emisión de precursores de ozono troposférico son las siguientes:
- Área (zonas habitacionales, comercios)
- Móviles (transporte carretero y no carretero)
- Puntuales (industrias)
- Biogénicas (cultivos y ecosistemas)
La revisión se hizo por entidad federativa, municipio o, en su caso, área geoestadística básica, en función de la cantidad disponible de información.
El instrumento destaca que se identificaron los COV con mayor impacto en la salud humana y aquellos que más inciden en la formación de compuestos secundarios. Simultáneamente se cuantificaron las emisiones municipales para definir las zonas críticas con mayores emisiones: las 20 principales fuentes generadoras de COV y las fuentes con el potencial máximo de formación de ozono (PMFO3).
También indica que el manejo y distribución del gas licuado del petróleo (GLP), el uso doméstico y comercial de disolventes, así como los vehículos que utilizan gasolina como combustible, son las fuentes más relevantes y con mayor contribución, no sólo por sus emisiones directas de COV, sino también por el PMFO3.
Estos sectores producen 74% de las emisiones de COV, 62% de los compuestos tóxicos y 69% de los compuestos orgánicos que generarían el potencial máximo de formación de ozono. Las zonas metropolitanas del Valle de México y de Toluca son las principales emisoras, seguidas por las de Monterrey, Guadalajara y Tijuana.
Ruta de implementación para reducir precursores de ozono troposférico
La formación de ozono en México se da principalmente en las zonas con niveles altos de radiación y emisiones de óxidos de nitrógeno y de emisiones de COV. El documento de las estrategias indica que la propuesta de ruta de implementación deberá ser establecida a partir de los datos del monitoreo atmosférico de ozono en el ámbito nacional y priorizar en aquellas zonas con problemas de altas concentraciones.
Para ello, la Estrategia propone implementar un programa de reducción de COV en zonas con alto potencial de formación de ozono entre 2020-2030 y reducir en 60% la emisión de COV a 2030.
Las “Estrategias integradas en contaminantes climáticos de vida corta para mejorar la calidad del aire y reducir el impacto al cambio climático” es editado por el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC), el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y la Coalición de Clima y Aire Limpio (CCAC). Es un documento que propone acciones para reducir las fuentes de mayor emisión de precursores de ozono troposférico, mejorar la calidad del aire y reducir los impactos en la salud de la población y los ecosistemas.