En un esfuerzo por abordar el cambio climático de manera decisiva, la comunidad internacional se ha comprometido a triplicar la capacidad mundial de energía renovable para 2030.
Sin embargo, un reciente informe de la Agencia Internacional de la Energía (AIE) revela que los planes actuales de muchos países aún no están alineados con este objetivo ambicioso fijado en la COP28.
El análisis de la AIE destaca que, si bien los países han expresado aspiraciones considerables en términos de capacidad renovable, estas aún no se reflejan completamente en sus Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC, por sus siglas en inglés). Actualmente, las NDC solo cubren el 12% de la capacidad necesaria para alcanzar la meta de triplicar la energía renovable para 2030, establecida en Dubai.
Potencial por explorar: 11 000 GW de capacidad renovable
Según el informe, los compromisos nacionales sugieren un potencial significativo. Si los países incorporaran todas sus políticas y planes actuales en las nuevas NDC previstas para el próximo año, podrían abarcar hasta el 70% de la capacidad requerida para cumplir con el objetivo de triplicación. Esto equivaldría a una capacidad instalada de 11 000 gigavatios (GW) de energía renovable a nivel mundial para 2030.
La adopción acelerada de energías como la solar fotovoltaica y la eólica ha sido impulsada por la reducción drástica de costos y el apoyo político renovado. Desde la firma del Acuerdo de París en 2015, la capacidad renovable agregada anualmente se ha triplicado, alcanzando casi 560 GW en 2023, con China liderando este crecimiento.
A pesar de estos avances, persisten desafíos significativos como los largos procesos de permisos, la falta de inversiones adecuadas en infraestructura de red y los altos costos de financiación, especialmente en economías en desarrollo.
El informe de la AIE ofrece recomendaciones clave para superar estos obstáculos, incluyendo mejorar la visibilidad de las políticas a largo plazo y reducir los riesgos financieros asociados a los proyectos renovables.
La AIE, desempeñando un papel crucial desde la COP28, sigue comprometida con apoyar a los gobiernos en la implementación efectiva de sus compromisos. A través de datos precisos, análisis detallados y recomendaciones políticas, la AIE está facilitando la transición hacia sistemas energéticos más sostenibles y resilientes a nivel global.
Mientras el camino hacia un futuro energético renovable parece prometedor, es imperativo que los países actúen rápidamente para traducir sus ambiciones en acciones concretas. Con el apoyo adecuado y la voluntad política, es posible acelerar el progreso hacia un mundo más limpio y sostenible para las generaciones venideras.
Este artículo no solo destaca los desafíos y oportunidades en la transición energética global, sino que también está diseñado para mejorar la visibilidad en los motores de búsqueda, asegurando que estas importantes discusiones alcancen a una audiencia más amplia interesada en el futuro de la energía renovable y la sostenibilidad ambiental.