Washington.- El presidente estadounidense, Joe Biden, pidió este jueves a los ciudadanos del país un mayor compromiso con el cuidado del medioambiente y con las acciones que sirven para luchar contra el cambio climático y crear un futuro más "saludable, seguro y equitativo para todos".
Con esta petición concluye Biden su proclamación con motivo del Día de la Tierra, que se celebra todos los 22 de abril y que este año coincide con la cumbre climática que ha organizado el mandatario y en la que van a participar cuarenta líderes mundiales.
Biden recuerda que el cambio climático ha afectado a millones de estadounidenses en los últimos años y pone ejemplos recientes como la saturación de la red eléctrica en Texas por el temporal de frío de este invierno, que llevó a la muerte a 111 personas hasta los incendios forestales de la Costa Oeste del año pasado que arrasaron cinco millones de acres (más de dos millones de hectáreas).
Los huracanes y las lluvias tropicales e inundaciones del año pasado en la costa Atlántica, así como la sequía en el medio oeste también son citados por Biden para recordar la devastación climática y la pérdida de hogares y negocios que conlleva.
Además, el presidente estadounidense reconoce que los negros, latinos e indígenas así como otras minorías "son los más golpeados" por los impactos del cambio climático y soportan la carga más alta de la polución, porque los datos demuestran que sufren en mayor medida enfermedades cardíacas y pulmonares y tienen mayores dificultades en el acceso al agua potable en sus hogares, o han tenido mayor riesgo de sufrir covid-19 en esta pandemia.
Reconoció, asimismo, que estos grupos han quedado fuera de muchas decisiones gubernamentales que les afectaban directamente.
"Tenemos la obligación de corregir estos errores históricos y construir para todos un futuro mejor con un aire más limpio que respirar, un agua más limpia que beber y comunidades más saludables que puedan vivir, trabajar y dar a su futuro un significado", añadió.
En este sentido recordó que su Gobierno ha decidido poner sobre la mesa la "más ambiciosa" agenda climática en la historia del país.
Esta misma mañana, Biden confirmó, durante la apertura de la cumbre climática, el compromiso de EUA de recortar las emisiones con efecto invernadero entre un 50 y un 50 por ciento para 2030 y alcanzar la neutralidad en las emisiones de carbono para 2050.
Biden anuncia que Estados Unidos buscará la neutralidad de carbono para 2050
Joe Biden, se comprometió a recortar "a la mitad" las emisiones con efecto invernadero de Estados Unidos para 2030, con el objetivo de alcanzar la neutralidad en las emisiones de carbono para 2050.
Al comenzar la Cumbre de Líderes sobre el Clima, una conferencia virtual organizada por la Casa Blanca en la que participan 40 líderes internacionales, Biden confirmó el plan de Estados Unidos de recortar sus emisiones entre un 50 % y un 52 % para el final de esta década.
"Estos pasos colocarán a Estados Unidos camino a convertirse en una economía con cero emisiones netas para no más tarde de 2050", aseguró el mandatario.
Ese compromiso es el mismo que ha asumido la Unión Europea (UE), que planea alcanzar también la neutralidad climática en 2050, y más ambicioso que el de China, que reiteró en la cumbre de este jueves su intención de lograr esa meta para 2060.
En cuanto a la reducción de emisiones de entre el 50% y el 52% para 2030 con respecto a los niveles de 2005, se trata de un objetivo que prácticamente dobla el que asumió Estados Unidos bajo el Acuerdo de París, que consistía en recortarlas entre un 26 y un 28% para 2025.
El objetivo estadounidense para 2030 es algo menor que el de la UE, que en vísperas de la cumbre alcanzó un acuerdo para reducir sus emisiones netas de CO2 "al menos" un 55% en 2030, frente al objetivo del 40% actual.
Con su anuncio y con la organización de la cumbre, Biden busca espolear nuevos compromisos de otros países de cara a la cumbre de la ONU sobre el clima COP26, que el Reino Unido presidirá en noviembre en Glasgow (Escocia).
"Estados Unidos representa menos del 15% de las emisiones del mundo. Ningún país puede resolver solo esta crisis", recalcó.
El mandatario describió la lucha por el clima como un "imperativo moral, un imperativo económico", y añadió que "realmente hay otra opción" que sumarse a ella.
"La ciencia (sobre la crisis climática) es innegable. Y los costes de la inacción no paran de crecer", advirtió Biden, quien también destacó las "oportunidades" que ha destapado ese problema para "crear empleos" en la economía verde.
Antes que Biden intervino en la cumbre la vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, quien avisó de que "ninguna región" del mundo es "inmune" a los efectos del cambio climático y mencionó en particular los huracanes Eta e Iota que el año pasado devastaron Centroamérica.
Por su parte, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, destacó el consenso mundial para actuar contra la crisis climática, en un mundo donde hay "tantos temas" en los que las grandes potencias no están de acuerdo.
"No importa de qué país seamos, sabemos qué mundo queremos dejar a nuestros hijos y nietos", afirmó el jefe de la diplomacia estadounidense.
El comienzo de la cumbre estuvo lastrado por problemas de audio, con un eco en el vídeo transmitido en directo que duró todo el discurso de Harris y parte del de Biden.