Bruselas .- Por primera vez, las medidas incluyen requisitos para reparar y reciclar, lo que contribuye a los objetivos de la economía circular al mejorar la vida útil, el mantenimiento, la reutilización, actualización y manejo de residuos de electrodomésticos.
El vicepresidente de Empleo, Crecimiento, Inversión y Competitividad de la Comisión Europea, Jyrki Katainen, afirmó que “ya sea fomentando la reparación o mejorando el consumo de agua, el diseño ecológico inteligente nos hace usar nuestros recursos de manera más eficiente, trayendo claros beneficios económicos y ambientales”.
“Estas medidas pueden ahorrar a los hogares europeos un promedio de 150 euros (164 dólares) por año y contribuir a ahorros de energía equivalentes al consumo anual de energía de Dinamarca para 2030”, refirió.
El funcionario mencionó que “es con pasos concretos como estos que Europa en su conjunto está adoptando la economía circular en beneficio de los ciudadanos, nuestro medio ambiente y las empresas europeas".
Miguel Arias Cañete, comisario europeo de Acción Climática y Energía, apuntó que “junto con etiquetas energéticas más inteligentes, nuestras medidas de diseño ecológico pueden ahorrar mucho dinero a los consumidores europeos y ayudar a la UE a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero”.
“El diseño ecológico es, por lo tanto, un elemento clave en la lucha contra el cambio climático y una contribución directa al cumplimiento de los objetivos establecidos en el Acuerdo de París”, consideró.
Añadió que “a medida que avanzamos hacia nuestro objetivo a largo plazo de una UE totalmente descarbonizada para 2050, nuestra estrategia de eficiencia energética y diseño ecológico serán cada vez más importantes”.
Esas medidas se adoptaron luego de un proceso de consulta, donde la Comisión adoptó 10 reglamentos de implementación de diseño ecológico, que establecen la eficiencia energética y otros requisitos para refrigeradores; lavadoras; lavaplatos y pantallas electrónicas, entre ellos los televisores.
Además, fuentes de luz y engranajes de control separados; fuentes de alimentación externas; motor eléctrico; refrigeradores con función de venta directa (como refrigeradores en supermercados y máquinas expendedoras de bebidas frías); así como transformadores y equipos de soldadura.