México.- Por medio del Programa Nacional de Auditoría Ambiental (PNAA), la Profepa fomenta el desempeño ambiental donde las empresas acceden a dos niveles de certificación voluntaria, estos son:.
1.- El cumplimiento de la regulación ambiental de las tres órdenes de gobierno y la implementación de aspectos de mejora de los procesos en un nivel básico.
2.- Requiere un Sistema de Gestión Ambiental y el cumplimiento del primer nivel, entre otras medidas de mejora.
El PNAA cuenta con 2 mil 287 empresas con certificado vigente, el 37.2 por ciento son grandes instalaciones, el 22.6 por ciento son medianas, 15.5 por ciento son de tamaño pequeño y el 24.7 por ciento son microempresas.
De los 236 certificados otorgados, 56 fueron para empresas micro, 38 para pequeñas, 46 para medianas y 96 para empresas grandes, de acuerdo a los criterios de la Secretaría de Economía en función del número de empleados.
La certificación ambiental voluntaria se emite a las empresas que demuestran el cumplimiento de la normatividad ambiental, implementan mejoras en sus procesos lo que les genera ahorros en los consumos de agua y energía o puede disminuir sus generaciones de emisiones y residuos.
Cabe señalar que la certificación implica incluir el cuidado del medio ambiente en la estrategia de negocios en el mediano y largo plazo, pero también es una decisión del más alto nivel que genera un impacto positivo en todos los que conforman la empresa.
La implementación de buenas prácticas de operación e ingeniería se mide a través del reporte anual de las empresas con certificado vigente, entre los resultados que se pueden observar en dicho informe de 1 mil 122 instalaciones certificadas destacan los siguientes:
- Disminución en el consumo de agua en 44.9 millones de m3, que equivale al gasto de 498 mil personas en un año.
- Ahorro de 2 mil 898 millones de kWh, equivalentes al consumo de 5 millones de personas en un año.
- Disminución en la emisión de 6 millones de toneladas de CO2 equivalentes. Mismas que se generan por 1.1 millones de vehículos compactos durante 1 año.
De esta manera, certificando empresas que vigilan aspectos ambientales significativos, se espera contribuir al logro de los compromisos fijados por el sector en materia ambiental, y al mismo tiempo, que cada vez más organizaciones productivas y de servicios vean el medio ambiente como un área de oportunidad que les permita mejorar su competitividad.