Madrid.- A pocos días de la presentación del informe del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC) de Naciones Unidas, las consecuencias de los fenómenos climáticos se multiplican en todos los puntos del planeta, con olas de calor, sequías, lluvias torrenciales e inundaciones.
Se prevé que el sexto informe del IPCC, que aprobará el organismo de la ONU en su quincuagésimo cuarta edición que comienza este lunes en Ginebra, aporte los fundamentos físicos del estado actual del planeta y los efectos del cambio climático, como ha explicado el técnico de Energía de la organización ecologista WWF, Sergio Bonati.
Las situaciones extremas, cada vez más normales
El aumento de temperatura "altera el funcionamiento del clima a nivel mundial, produciendo estas situaciones que ahora llamamos extremas, pero que cada vez van a ser más normales, como el incremento de días que no precipita, lo que conlleva un riesgo asociado de sequía, incendios o de precipitaciones más fuertes".
Los científicos prevén que los efectos climáticos "van a ir a más por las proyecciones que hay actualmente": la temperatura media global va a seguir incrementándose a lo largo de las próximas décadas y a medida que se incrementa "van a ir aumentando los efectos del cambio climático".
Y es lo que se está viendo ya en el área del Mediterráneo, donde, según las previsiones científicas, las temperaturas subirán más de un grado en relación con otras zonas del planeta.
En España se ha registrado un descenso de un 6% de las precipitaciones en el último año hidrológico -desde el pasado 1 de octubre hasta la primera semana de julio-, según datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Inundaciones en Europa, incendios en Norteamérica
En el resto de Europa, hace pocos días, en Alemania, Bélgica, Luxemburgo, Países Bajos y Austria se han producido lluvias torrenciales que han dejado inundaciones con cientos de muertos, desaparecidos y daños incalculables, sobre todo en los dos primeros países.
Por otro lado, la subida del nivel del mar está provocando el hundimiento de muchas islas como Vanuatu, en Oceanía, o las islas estadounidenses de Tangier, frente al estado de Virginia donde viven unas 500 personas, o la de Jean Charles, en el estado de Louisiana, de la que han tenido que salir sus habitantes.
Según un informe de Save the children presentado en abril pasado, más de 700 millones de niños viven en 45 países con riesgos de padecer fenómenos climáticos como sequías o huracanes.
Y sequías, altas temperaturas o incendios forestales son los que se están registrando en Norteamérica, concretamente en los estados de California y Oregón, donde la falta de precipitaciones ha dejado sequías que han dado paso a incendios forestales que han calcinado decenas de miles de hectáreas, quemado viviendas y provocado la evacuación de miles de personas.
Pero también en Canadá, donde este sábado se han llegado a registrar 400 incendios forestales en las provincias de Ontario y Columbia Británica, algo menos que días precedentes, pero han provocado la evacuación de miles de personas, tras el registro de temperaturas inusualmente altas desde finales de junio.
Y también en Latinoamérica, donde las sequías afectan a gran parte de Centroamérica provocando las migraciones climáticas hacia el norte, las lluvias torrenciales en Colombia con más de 10 mil familias damnificadas o los incendios en la Amazonía que están alterando el clima en todo el continente.
Sin olvidar la desaparición de los glaciares en todo el mundo, fuente de agua para muchos agricultores y familias de áreas rurales.
Frenar el incremento de las temperaturas
Según Bonati, de estos efectos, "los más relevantes son el incremento del nivel del océano, la reducción y derretimiento de los glaciares, y la probabilidad de incremento de fenómenos climatológicos extremos", como los que se ha visto en el norte de Europa y "quizá los que más impacto tienen en la población humana".
Por ello, advierte de que "está en nuestra mano y de todos los países del mundo frenar el incremento de la temperatura para minimizar la probabilidad de estos sucesos".
En noviembre próximo está prevista la celebración de la Cumbre del Clima en Glasgow (Reino Unido), reunión en la que se prevé lograr un compromiso global para la reducción de las emisiones responsables del calentamiento global.