Ciudad de México.- El diputado Miguel Ángel Macedo Escartín presentó una iniciativa para abrogar la Ley de Movilidad del Distrito Federal y expedir la Ley de Movilidad Sustentable de la Ciudad de México para armonizar y modernizar la normatividad, además de promover la movilidad sustentable y la disminución de los conflictos viales que diariamente proliferan en las calles de la ciudad.
La figura de Distrito Federal cambió, dijo Macedo, y añadió que el Congreso local debe garantizar los derechos de la ciudadanía a un medio ambiente sano y de movilidad, incorporando el concepto de movilidad con un enfoque integral.
“La movilidad es un modelo de traslado saludable de bajo consumo de carbono, que prioriza elevar la calidad de vida urbana y el bienestar colectivo, así como la creación de espacios públicos que favorezcan la sana interacción entre las personas, la protección de los sectores más vulnerables como son peatones, discapacitados y ciclistas, dando valor al tiempo empleado a los desplazamientos, garantizando el acceso universal de los ciudadanos a los lugares públicos y equipamientos en transporte público colectivo y no en medios motorizados”, añadió el diputado Macedo Escartín.
La iniciativa da cuenta de la dimensión del problema. En la última década, el parque vehicular circulando en la Zona Metropolitana de la Ciudad de México se duplicó.
La tendencia, destaca la propuesta fue más notoria, en 2018, “toda vez que reportó un incremento en el parque vehicular de 29 millones de 458 mil 389 unidades, lo que aumenta el grave problema de congestionamiento vial y contaminación”.
La cantidad de automóviles en circulación impacta el crecimiento del kilometraje recorrido por viaje y la saturación creciente de la red vial obliga a incrementar el tiempo de operación de los motores en condiciones ineficientes y bajas velocidades de circulación, lo cual produce viajes largos, llegando a consumir 4.5 millones de litros de diésel, 18 millones de litros de gasolina y 700 mil litros de gas licuado de petróleo diariamente.
Esta tendencia implica un aumento en todos los impactos negativos generados por el automóvil, sobre todo en rubros como gases de efecto invernadero, contaminación, obesidad, congestión y ruido.
Por eso, dijo, en el nuevo ordenamiento deben incluirse también los temas de sustentabilidad, el uso de vehículos no contaminantes, así como dejar establecida la obligación de autoridades locales para exhortar a comunidades, empresas, academia y organizaciones civiles, a que realicen planes locales de sustentabilidad.
“Para cumplir con la meta de ser sustentable, es necesaria la colaboración entre autoridades y sociedad civil. Se deben retomar los lineamientos nacionales e internacionales encaminados a la sustentabilidad y es indispensable que en la adecuación de la normatividad relativa a la movilidad se complemente el elemento que transmita la idea de que para el desarrollo se debe tomar en cuenta la economía, a la sociedad y al medio ambiente, encaminado a que las políticas públicas tengan una visión progresista”, concluyó el legislador en la tribuna.
La iniciativa fue remitida a la Comisión de Movilidad Sustentable del Congreso de la Ciudad de México para su análisis y dictaminación.