México.- La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) informó que en los últimos seis meses ha observado tala ilegal en varias zonas de la mariposa monarca: la comunidad indígena San Felipe de los Alzati, y en los ejidos “Crescencio Morales” y “Nicolás Romero”, del municipio de Zitácuaro, así como en los ejidos “Rondanilla”, en Angangueo, y “El Calabozo Fracción I y II”, en el municipio de Seguido, todos en el estado de Michoacán.
Asimismo, señala que en 2017 se incrementó el cambio de uso de suelo para el establecimiento de huertas de aguacate, principalmente en los municipios de Donato Guerra, en el Estado de México, y en Zitácuaro y Ocampo, Michoacán.
Para evitar el aumento de los delitos forestales, la Profepa realiza operativos de inspección y vigilancia permanentes en la Reserva de la Biósfera Mariposa Monarca, en específico en la Zona Núcleo, para erradicar la tala ilegal a gran escala.
La Reserva de la Biosfera Mariposa Monarca abarca diez municipios de los estados de México: Donato Guerra, San José del Rincón, Temascalcingo y Villa de Allende, y de Michoacán: Angangueo, Aporo, Contepec, Ocampo, Senguio y Zitácuaro.
Estos bosques forman parte del ecosistema templado de México y en ellos predominan las masas forestales de pino, pino-encino y oyamel, siendo éstos los que propician los microclimas adecuados para las migraciones de mariposas, ya que es ahí donde establecen sus colonias de hibernación.
El oyamel se distribuye en las montañas más altas, entre los 2 mil 400 y los 3 mil 600 metros de altitud, en laderas o cañadas húmedas, donde habitan especies representativas de las regiones neártica y neotropical, que incluyen anfibios, reptiles y más de 130 especies de aves y 56 de mamíferos. La Reserva alberga también 423 especies de plantas vasculares.
Como especies icónicas destacan la mariposa Monarca (Danaus plexippus L.), el ajolote (Ambystoma rivulare), la salamandra (Ambystoma ordinarium), la falsa salamandra (Pseudoeurycea bellii), el búho cornudo (Bubo virginianus), el coyote (Canis latrans), el venado cola blanca (Odocoileus virginianus), el algodoncillo (Asclepia syriaca), oyamel (Abies religiosa), ciprés mexicano (Cupressus lusitanica) y piñonero azul (Pinus maximartinezii).
Los bosques donde hiberna la mariposa monarca favorecen la captación hídrica que provee de agua a las poblaciones de la región e incluso a las ciudades de México y Toluca; son el asiento de diversas culturas indígenas; proveen servicios ambientales globales, secuestran carbono y satisfacen necesidades tanto recreativas como espirituales.
Parte de esta superficie ha sido afectada por la deforestación y la degradación forestal, y se estima que entre 2001 y 2012 la tala ilegal afectó dos mil 507 hectáreas (ha), de las cuales mil 503 fueron por tala clandestina a gran escala y 554 ha por tala “hormiga”.
La Profepa reconoce que actualmente hay taladores, transportistas y algunos dueños de centros de almacenamiento y transformación de materias primas forestales que aprovechan madera ilegal, además de haber cambio de uso de suelo por la ampliación de las fronteras agropecuarias y urbanas.
Como una medida preventiva y de inhibición de nuevos derribos y para dar atención inmediata a los ilícitos denunciados, se reactivaron los comités de vigilancia ambiental participativa, grupos integrados por ejidatarios y comuneros que habitan en la Reserva, lo que incrementó los recorridos de vigilancia y reforzó la confianza entre los pobladores.
Los operativos forestales permanentes son apoyados por las secretarías de la Defensa Nacional y de la Marina, y por la Guardia Nacional, lo que ha permitido tareas de inspección y vigilancia en las fases de aprovechamiento, transporte, almacenamiento y transformación de materias primas forestales.
Además, permite imponer sanciones administrativas o penales, favoreciendo la restauración y compensación en predios afectados por tala y privilegiando el decomiso de maquinaria, herramientas y materias primas forestales irregulares.
El trabajo coordinado ha tenido como resultado 151 acciones de inspección y vigilancia, que permitieron poner a disposición del Ministerio Público de la Federación a cinco personas, clausurar 19 predios y dos Centros de Almacenamiento y Transformación de Materias Primas Forestales, así como el aseguramiento de 20 vehículos, ocho motosierras, ocho herramientas y equipos, 510.8 metros cúbicos de madera y 902 kilogramos de carbón.