Madrid.- En una intervención ante el plenario de la cumbre del clima (COP25), el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, repasó el estado de las negociaciones de esta cita de Madrid y recalcó que lograr esos compromisos de los países más contaminantes es "absolutamente esencial" para mantener los objetivos del Acuerdo de París.
También pidió que "todas las naciones intensifiquen" sus esfuerzos el próximo año, con compromisos más ambiciosos. "Necesitamos más ambición, más solidaridad y más urgencia", insistió.
Mientras los casi 200 países aceleran las negociaciones técnicas en busca de acuerdos y compromisos en esta cumbre de Madrid, Guterres avanzó que los objetivos "están a nuestro alcance", aunque reconoció que "queda mucho" trabajo para poder lograrlos y evitar que en el futuro "nosotros y las generaciones futuras paguemos un precio insoportable" por el cambio climático.
"Necesitamos que todos los gobiernos sigan el ejemplo de los 75 países que se han comprometido a presentar en 2020 estrategias para alcanzar las emisiones cero para 2050 o a alcanzar la neutralidad del carbono en 2050 o antes", recalcó.
Guterres señaló al carbón como "el principal obstáculo" para lograr que el aumento de las temperaturas se limite a 1.5 grados centígrados de media global por encima de los niveles preindustriales.
Por ello, urgió a cortar la capacidad de generación eléctrica a partir del carbón y a que no se construyan nuevas plantas eléctricas alimentadas por carbón a partir de 2020.
Si trasladamos la fiscalidad de los ingresos al carbono, los impuestos recaerán sobre la contaminación, no sobre la gente
El secretario general de Naciones Unidas apostó también por acelerar la transición a una energía renovable al 100 por ciento, poner fin a los subsidios a los combustibles fósiles y a descarbonizar sectores clave, como el transporte, la navegación o la vivienda.
"Si trasladamos la fiscalidad de los ingresos al carbono, los impuestos recaerán sobre la contaminación, no sobre la gente", insistió.
Guterres también resaltó la importancia de atender "la dimensión social" del cambio climático para ocuparse de las personas cuyos empleos y modos de vida se vean afectados por la transición hacia la economía verde.
Igualmeente, pidió atender al componente de género, para que las mujeres, especialmente las pobres, se vean beneficiadas por esa transición.
Y apuntó también a cumplir los compromisos con los países menos desarrollados o los pequeños países isleños, que son "los primeros en sufrir" los efectos del cambio climático, a pesar de ser los que menos han causado el fenómeno.