Nairobi.- Más de 32 estudios de videojuegos se han unido al Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), Alianza de Jugando por el Planeta, plantando más de un millón de árboles e involucrando a 130 millones de jugadores en temas relacionados con el medio ambiente, según el Informe Anual del Impacto de la Alianza, que fue recientemente publicado. El informe muestra los progresos realizados por la industria en materia de descarbonización y activaciones verdes* en los videojuegos, así como cuál será el siguiente paso a dar.
De acuerdo con el informe, en 2021 The Green Game Jam, que reúne a los principales nombres del mundo de los videojuegos en PC, móviles y consolas para educar y empoderar a millones de jugadores a favor de la naturaleza, triplicó su tamaño gracias a los 30 estudios que se unieron, todo lo cual llevó a la plantación de 266.000 árboles, a la recaudación de 800.000 dólares y a la participación de alrededor de 130 millones de jugadores en temas relacionados con los océanos y los bosques, en apoyo de la UNREDD y el Decenio de las Naciones Unidas para la Restauración de los Ecosistemas, con el 80% de ellos respondiendo positivamente a estos asuntos.
Además, el 60% de los miembros de Jugando por el Planeta se han comprometido a tener emisiones negativas de carbono en 2030. Siete nuevos estudios se unieron en 2021, logrando que se cuente con 32 miembros, con una base de jugadores combinada de más de mil millones. Además se lanzó un nuevo Young Green Game Jam con el apoyo de los estudios TiMi, que a su vez tuvo el apoyo de estudiantes de más de 300 universidades.
“La industria de los videojuegos es un nuevo aliado en la carrera por conseguir un planeta con emisiones negativas y una actitud positiva hacia la naturaleza. El trabajo que la Alianza Jugando por el Planeta comenzó en 2021 es impresionante, y demuestra lo que es posible cuando la colaboración se imponen a los esquemas tradicionales de competencia. Aunque queda mucho por hacer, la iniciativa ha recorrido un largo camino en apenas dos años”, dijo Sam Barratt, jefe de juventud, educación y promoción del PNUMA
Además del progreso que se ha logrado dentro de esta alianza, se ha inspirado a los principales sellos de la industria musical animándoles a lanzar su propio pacto musical por el clima (Music Climate Pact in December 2021). Adicionalmente, también se han obtenido nuevos datos sobre el consumo energético que realizan los dispositivos móviles durante las sesiones de juegos, actualizando así las cifras de hace 10 años para que los estudios puedan calcular con mayor precisión su huella de carbono.
El informe también destaca la dirección que la Alianza Jugando por el Planeta estima tomar durante 2022, año cuando se publicará un nuevo "Libro Blanco" con datos y consejos para la industria sobre cómo reducir sus emisiones.
El tema de la sesiones Green Game Jam de 2022 será el de los bosques, los alimentos y el futuro. Con la actividad se pretende superar el número de participantes de ediciones anteriores, además de aumentar el alcance y la repercusión que puede tener la iniciativa: ya hay más de 36 estudios inscritos, a los que se sumarán otros en las próximas semanas. También se creará una nueva secretaría para acoger la iniciativa.
El informe anual del impacto está concebido como un mecanismo diseñado principalmente para rendir cuentas sobre la transparencia y el progreso; y los miembros que no cumplen sus compromisos son apartados de esta alianza.