El "Triángulo de Djéké", un bosque no talado donde habitan gorilas occidentales de llanura en peligro crítico, forma parte ahora del Parque Nacional de Nouabalé-Ndoki.
La inclusión de este bosque de 95 kilómetros cuadrados se produce tras más de 25 años de investigación científica en la zona y una amplia consulta a la comunidad para diseñar un plan de gestión que beneficie tanto a las comunidades locales como a la fauna salvaje.
"La inclusión del triángulo de Djéké en el parque no sólo proporciona protección a esta zona de bosque de alta integridad y a su biodiversidad única, sino que también asegura los derechos consuetudinarios de las comunidades a acceder y beneficiarse de los recursos de los que dependen, como la miel o las orugas, ya que ahora tenemos la seguridad de que este bosque permanecerá intacto a perpetuidad", explica Ben Evans, de WCS, director de la unidad de gestión del parque.
Antes de la publicación en el Boletín Oficial, la WCS dedicó dos años a consultas comunitarias en 13 aldeas y asentamientos de la zona, siguiendo las normas establecidas para obtener el Consentimiento Libre, Previo e Informado (CLPI) de los pueblos indígenas y las comunidades locales. Las comunidades participaron directamente en el debate sobre la ampliación del Parque y en la identificación de zonas de importancia cultural y económica dentro de Djéké.
El resultado fue la inclusión de disposiciones para una zona comunitaria de uso sostenible para la recolección continuada de productos no madereros y la pesca tradicional dentro del Triángulo de Djéké. El Gobierno congoleño ratificó oficialmente el Plan de Gestión del Parque el 10 de febrero de 2023, certificando la gacetización del Triángulo de Djéké y validando el uso comunitario sostenible.
"No se nos prohíben actividades como la recolección de hojas, setas o miel, o la pesca, todas ellas permitidas en la zonificación; Lo que sí se nos prohíbe es el uso de armas de fuego, y estamos de acuerdo en esto porque sabemos que en Djéké hay gorilas habituados a la presencia humana, y si usamos armas, corremos el riesgo de molestarlos", declaró Gabriel Mobolambi, jefe de la aldea de Bomassa, el asentamiento más cercano al triángulo de Djéké, durante una última reunión comunitaria celebrada a finales de enero de 2023, tras la validación del proceso de CLPI por parte del Gobierno congoleño.
El triángulo de Djéké es una zona de importancia mundial para el estudio de la ecología y el comportamiento de los gorilas occidentales de llanura, ya que alberga Mondika, uno de los centros de investigación más longevos sobre esta especie. Desde 1995, tres grupos de gorilas se han habituado a la presencia humana en los alrededores de Mondika, lo que ha permitido la observación directa de los gorilas en su entorno natural. Ello ha permitido recoger datos de forma continuada durante 25 años y avanzar significativamente en el conocimiento de esta especie, la menos conocida de los grandes simios.
El centro de investigación de Mondika proporciona empleo estable a más de 40 personas, en su mayoría indígenas, así como oportunidades de desarrollo de capacidades para los investigadores congoleños, con importantes inversiones en el liderazgo de las mujeres. El actual desarrollo del turismo, con la próxima construcción de varios alojamientos en las inmediaciones del Parque, aumentará aún más las oportunidades económicas relacionadas con el Triángulo del Djéké para las poblaciones locales.
La inclusión del Triángulo de Djéké en el Parque fue posible gracias a la larga colaboración del Parque con Olam Agri, la empresa maderera con certificación FSC que opera en los alrededores del Parque. Olam Agri participa desde 1999 en un innovador acuerdo tripartito con el gobierno y la WCS para contribuir a la protección de la vida salvaje en el paisaje del norte del Congo y reducir el impacto de la tala.
El Parque Nacional de Nouabalé-Ndoki se creó en 1993 y se amplió en 2012, cuando se añadió el Triángulo de Goualougo, de 374 km2, una extensión de bosque inalterado que alberga chimpancés que han tenido poco o ningún contacto con los humanos. Tras la adición del Triángulo de Djéké, el Parque abarca ahora un total de 4334 km2.
"Se trata de un ejemplo a seguir para la creación y ampliación de zonas protegidas en la región, que debe hacerse teniendo en cuenta los intereses del país, sus habitantes y su fauna", comentó la Ministra de Economía Forestal, S.E. Dña. Rosalie Matondo.
La República del Congo, cuyo 60% está cubierto de bosques, cuenta con una docena de zonas protegidas que representan el 13.36% de su territorio. Esta ampliación se produce pocos meses después del anuncio de la creación de las primeras zonas marinas protegidas del Congo, que ahora cubren el 1.,01% de la Zona Económica Exclusiva (ZEE) del país.