Lima.- Más de 500 personas, entre pobladores y turistas, fueron evacuados en tren tras la inundación que sufrió durante el viernes pasado el pueblo de Machu Picchu, ubicado en la parte baja de las montañas donde se encuentra la famosa ciudadela inca, en la región de Cusco, en el sur de Perú.
La empresa ferroviaria PeruRail informó este lunes que, tras el desborde del río Alcamayo, evacuó a 569 pasajeros, entre pobladores de comunidades vecinas y turistas nacionales y extranjeros, en dos frecuencias de tren programadas para ese fin.
En ese sentido, se retiró a todos los visitantes que estaban alojados en el pueblo de Machu Picchu gracias a un trabajo conjunto con la municipalidad del distrito, el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) y la Policía Nacional del Perú (PNP).
"Nuestra prioridad en este momento es seguir apoyando a las instituciones que vienen atendiendo la emergencia y a los afectados con este desastre natural", sostuvo la empresa en un comunicado.
Informó que también se evacuará a un grupo de turistas que completaron la visita a pie hacia Machu Picchu por el Camino Inca y que arribaron a la zona por el acceso amazónico.
PeruRail indicó que seguirá coordinando la programación de trenes especiales para atender evacuaciones o para facilitar el transporte de maquinaria, víveres, medicina, o personal para atender la emergencia.
Las operaciones ferroviarias en general en la ruta a Machu Picchu permanecen suspendidas, mientras que la empresa brinda facilidades a sus clientes para hacer modificaciones, reprogramaciones, o devoluciones de los pasajes para visitar la famosa ciudadela.
Las intensas lluvias registradas en el Cusco provocaron el desborde del río Alcamayo, que cubrió de piedras y lodo las calles del pueblo de Machu Picchu, los primeros pisos de varias viviendas, hoteles y restaurantes, así como parte de la vía férrea que moviliza a los turistas hacia la ciudadela inca.
El Centro de Operaciones de Emergencia Regional informó que este suceso dejó una persona herida y otra desaparecida, además de una vivienda destruida, cuatro afectadas y diversos daños en tres locales comerciales del pueblo, también conocido como Aguas Calientes y ubicado en la provincia cusqueña de Urubamba.
Trabajadores y vecinos del pueblo afectado realizaron labores de limpieza y remoción de escombros, junto a efectivos de la Policía Nacional, mientras que la empresa Electro Sur Este activó un plan de contingencia para restablecer el servicio de energía eléctrica en la zona, que se quedó sin suministro tras la emergencia.