ONU Cambio Climático.- Los delegados de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático COP27 concluyeron el segundo diálogo técnico del primer balance mundial, un proceso que es fundamental tanto para la aplicación del Acuerdo de París como para acelerar la acción climática.
En la clausura del diálogo, el viernes pasado, el Secretario Ejecutivo de las Naciones Unidas para el Cambio Climático, Simon Stiell, subrayó que el balance es mucho más que un simple ejercicio técnico.
"El balance mundial es un ejercicio de ambición. Es un ejercicio de responsabilidad. Es un ejercicio de aceleración", dijo Stiell. "Es un ejercicio que pretende asegurarse de que cada Parte está cumpliendo su parte del trato, sabe dónde tiene que ir después y con qué rapidez tiene que avanzar para cumplir los objetivos del Acuerdo de París".
La semana pasada, delegados de gobiernos, observadores y diferentes expertos participaron en una serie de eventos en la COP27 para debatir en qué aspectos están avanzando colectivamente hacia el cumplimiento de los objetivos del Acuerdo de París, y en cuáles no. Estos debates pueden ayudar a los países a corregir el rumbo para que puedan aumentar su ambición de alcanzar el objetivo del Acuerdo de París de limitar el calentamiento global a 1.5 grados centígrados.
Los participantes compartieron los mejores datos científicos disponibles y las evaluaciones de la mitigación, la adaptación y los medios de aplicación (financiación del clima, transferencia de tecnología y creación de capacidades). También expusieron soluciones climáticas e identificaron los obstáculos que dificultan la adopción de medidas.
"Nos alegramos de que todos los participantes hayan debatido y se hayan implicado de forma significativa", declaró Farhan Akhtar, cofacilitador del diálogo técnico. "Si bien es comprensible que las perspectivas difieran en la sala, esperamos que estemos comprendiendo nuestros retos y dónde hay oportunidades para abordarlos".
Aunque el diálogo se centra en hacer un balance de las acciones pasadas, también se trata de dar un impulso hacia adelante para desbloquear acciones y apoyos climáticos más ambiciosos.
"Una parte importante de este ejercicio consiste en identificar las oportunidades de acción: en la mitigación, en la adaptación, en la financiación, en la transparencia y en la incorporación de lo que hacen también los que están fuera del proceso", dijo Stiell. Se trata de "dónde estamos" para informar de "hacia dónde debemos dirigirnos".
El balance mundial se desarrolla en una década crítica para la acción climática. Las emisiones globales deben reducirse casi a la mitad para 2030 para que el mundo tenga una oportunidad de alcanzar el objetivo del Acuerdo de París de limitar el aumento de la temperatura global a 1.5 grados centígrados. También se necesita una adaptación transformadora para ayudar a las comunidades a hacer frente a los impactos climáticos que ya se están produciendo.
Sin embargo, un nuevo informe de ONU Cambio Climático publicado el mes pasado muestra que, si bien los países están doblando la curva de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero a la baja, estos esfuerzos siguen siendo insuficientes para limitar el aumento de la temperatura mundial a 1.5 grados centígrados a finales de siglo.
Según el informe, los compromisos climáticos combinados de 193 Partes en el Acuerdo de París podrían situar al mundo en la senda de los 2.5 grados centígrados de calentamiento para finales de siglo.
Las conclusiones del informe subrayan la necesidad de una aplicación urgente y una acción climática mucho más ambiciosa.
"El balance mundial es una oportunidad para estudiar cómo hacerlo de forma integral: un balance que tenga en cuenta la mitigación, la adaptación y los medios de aplicación y apoyo, así como los elementos de pérdidas y daños y las medidas de respuesta", dijo Stiell. "Lo reúne todo".
¿Qué sucede a continuación?
El proceso del balance mundial tiene tres componentes:
- Recogida y preparación de la información
- Evaluación técnica
- Examen de los resultados
La última fase, el examen de los resultados, tendrá lugar en la COP28 de 2023. Será entonces cuando se sinteticen y presenten las conclusiones de la evaluación técnica y se discutan y consideren sus implicaciones.
Los componentes de evaluación técnica y de recopilación y preparación de información del inventario se están llevando a cabo simultáneamente y concluirán con el tercer y último diálogo técnico en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático que se celebrará en Bonn en junio del año que viene.
Los co-facilitadores del diálogo técnico prepararán un informe resumido en las próximas semanas para recoger los debates de la COP27.
"Los animo a que se aseguren de que los resultados del balance mundial se centren en la acción: que en última instancia informen a las Partes de manera que puedan actualizar y mejorar rápidamente sus acciones y su apoyo, que lo hagan de una manera determinada a nivel nacional y de una forma que potencie la colaboración internacional", dijo Stiell.