Naciones Unidas.- A poco más de un mes para que dé comienzo la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP27) que se celebrará en Sharm el-Sheikh, Egipto, ya se están creando las condiciones propicias para que se logre un resultado político en relación con los océanos.
El objetivo es que se incluya una mayor ambición para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, medidas reforzadas para aumentar la resiliencia de las comunidades costeras a los impactos del cambio climático y la financiación necesaria para ello.
Los océanos cubren alrededor del 70% de la superficie del planeta, y los habitantes de las regiones costeras siguen estando a la cabeza de la lucha contra el cambio climático, ya que son quienes se ven afectados de forma más desproporcionada.
Sin embargo, los océanos también tienen un enorme potencial para almacenar carbono. Las aguas costeras son, por ejemplo, un lugar privilegiado para proyectos de energías renovables.
A partir de un evento celebrado el pasado mes de junio sobre océanos y el cambio climático, la secretaría de ONU Cambio Climático ha publicado un nuevo informe en el que se destaca la importancia vital del océano para los medios de vida y la biodiversidad. Además, se reconoce como componente fundamental del sistema climático, y se destaca la necesidad de una mayor acción climática relacionada con el océano en la COP27.
El informe analiza la urgencia de que los gobiernos promuevan marcos políticos claros y a largo plazo para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, incluso a partir de la energía renovable en alta mar y la reducción de emisiones del transporte marítimo.
El Informe sobre el Diálogo sobre los Océanos y el Cambio Climático expone diez mensajes clave para que los gobiernos los tengan en cuenta en el camino hacia la COP27. Estos establecen las oportunidades para una mayor ambición y acción para la acción climática de los océanos a nivel nacional e internacional. Los mensajes son los siguientes:
- Debemos proteger el océano y valorar su potencial como lugar de soluciones y acciones climáticas sostenibles.
- Las soluciones basadas en los océanos ofrecen importantes opciones de mitigación (reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero) y de adaptación (aumento de la resiliencia al cambio climático).
- El océano ofrece un espacio para soluciones integradas que pueden reflejarse en las políticas y estrategias climáticas nacionales.
- La tecnología marina y las soluciones basadas en la naturaleza marina y costera deben integrarse para garantizar que la acción sea más sólida, completa y rentable que cuando se utiliza cualquiera de las dos soluciones por separado.
- Debemos utilizar, mejorar e integrar los últimos conocimientos científicos disponibles sobre los océanos y otros sistemas de conocimiento.
- Es necesario un enfoque de toda la sociedad para la acción océano-clima, que incluya abordar los aspectos de gobernanza.
- Es necesario aumentar la financiación de la acción océano-clima y apoyar el acceso a la financiación
- El refuerzo de la financiación y otras ayudas, incluido el desarrollo de capacidades, debe abarcar la complejidad para ofrecer soluciones innovadoras y multidisciplinares.
- Un marco para los esfuerzos de colaboración entre los procesos de la ONU aumentaría el apoyo institucional a la acción océano-clima.
- Los futuros diálogos sobre el océano y el cambio climático deberían centrarse en temas concretos para profundizar en soluciones específicas que apoyen y refuercen estratégicamente la acción océano-climática a nivel nacional e internacional y en el marco del proceso de la CMNUCC.
El año 2022 ha sido bautizado como "el súper año de los océanos", con un número clave de avances en la acción océano-clima. El pasado mes de marzo, la Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente acordó iniciar las negociaciones para un tratado mundial vinculante que ponga fin a la contaminación por plásticos.
Por otro lado, en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Océanos, celebrada en Lisboa en junio, los gobiernos acordaron colectivamente aumentar las acciones innovadoras y basadas en la ciencia para hacer frente a la emergencia de los océanos.
El Diálogo sobre océanos y cambio climático celebrado en junio recibió el mandato de los gobiernos en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26) celebrada el año pasado en Glasgow (Reino Unido). El presidente del Órgano Subsidiario de Asesoramiento Científico y Tecnológico de la CMNUCC, Tosi Mpanu-Mpanu, describió el diálogo como el inicio de un "nuevo mandato y una nueva oportunidad para reforzar la acción sobre los océanos y el cambio climático en el marco de la CMNUCC".
Un mensaje claro que surgió del Diálogo es el de la importancia de “volver el Acuerdo de París más azul”, haciendo del océano un lugar para la innovación y la acción climática real.
"Tenemos que cerrar la brecha de financiación, especialmente para la adaptación al cambio climático en el contexto de los océanos. El reconocimiento oficial de los resultados del Diálogo sobre los océanos es un paso claro en el proceso de la CMNUCC que puede informar sobre la futura financiación, las prioridades de financiación y los planes de aplicación de la acción climática en los océanos a nivel nacional y local", dijo Lisa Schindler Murray, del Grupo de Expertos del Programa de Trabajo de Nairobi de la CMNUCC.
Los trabajos recientes del Comité Ejecutivo de Tecnología (CET) de la CMNUCC, del Grupo de Expertos en Océanos del programa de trabajo de Nairobi, de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) y de Friends of Ecosystem-based Adaptation (FEBA) demuestran que las soluciones integradas basadas en la tecnología y en la naturaleza tienen el potencial de ser más sólidas, completas y rentables que cualquiera de ellas por separado, y que las medidas basadas en los océanos ofrecen importantes opciones de resiliencia a los impactos y riesgos del cambio climático.
Estas soluciones incluyen sistemas de alerta temprana para eventos extremos y enfoques tales como la restauración de la vegetación costera junto con la construcción de diques para reducir el impacto de las mareas de tormenta y el aumento del nivel del mar.