Osaka (Japón).- El G20 "reafirma su compromiso para la plena implementación" de las medidas pactadas en París en 2016 y se fija la fecha de 2020 para "actualizar las contribuciones nacionales" a la lucha común contra el calentamiento global, según la declaración conjunta adoptada al término de la cumbre celebrada en Osaka (Japón).
En el documento se añade un punto en el que Estados Unidos "reitera su decisión de retirarse de los Acuerdos de París porque suponen una desventaja para los trabajadores y contribuyentes estadounidenses".
El primer ministro japonés Shinzo Abe, afirmó que los líderes del G20 "lograron encontrar un terreno común" frente a la crisis climática y pese a las divergencias entre sus miembros, en una rueda de prensa celebrada al término de la reunión.
En el texto se señala el "fuerte compromiso" de Estados Unidos, para la protección ambiental y reconoce a este país como "un líder global en la reducción de emisiones", pese a su retirada unilateral de los compromisos de París y a que también se abstuvo de firmar una declaración común similar en la anterior cumbre del G20 en Buenos Aires.
En la declaración conjunta se señala asimismo la necesidad de que los objetivos particulares de cada país reflejen "sus responsabilidades diferenciadas y capacidades respectivas, según sus circunstancias nacionales".
En materia de protección medioambiental, los líderes también apoyaron el objetivo de "reducir a cero la contaminación marina adicional de plástico para 2050", una meta global que bautizaron como "Visión de Océanos Azules de Osaka".
Para lograrlo, apuestan por un "mejorar la gestión de residuos" y "reducir la descarga de basura plástica sin procesar", así como por "aplicar soluciones innovadoras al tiempo que se reconoce el papel importante del plástico para la sociedad".