CDMX. La Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) indicó que la Ciudad de México fue elegida sede del Foro Regional de Conservación de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) por sus resultados en materia ambiental.
Un ejemplo del cambio ambiental que ha tenido la capital del país es que en la década de los años 80 y principios de los 90 la Ciudad de México era considerada una de las urbes más contaminadas del mundo y no registraba ningún día limpio; en el año 2018 ya se registraban 99 días limpios y para el año 2022 aumentaron a 120 días limpios.
La valoración de días limpios se realiza considerando los estándares de calidad del aire de ozono, partículas menores a 10 y 2.5 micrómetros, monóxido de carbono, dióxido de azufre y óxidos de nitrógeno.
A nivel mundial se decretan contingencias ambientales atmosféricas para proteger la salud de las personas y reducir la emisión de gases contaminantes. En la Zona Metropolitana del Valle de México, cuando se llega a 155 partes por billón, la Comisión Ambiental de la Megalópolis (CAMe) decreta contingencia ambiental, mientras que, en otras ciudades, por ejemplo, de Estados Unidos, se decreta contingencia ambiental cuando, en promedio de una hora, superan las 200 partes por billón.
Con el valor actual de aplicación de contingencia ambiental en la Zona Metropolitana del Valle de México, durante los años 90’s se habrían contabilizado más de 280 días en contingencia ambiental atmosférica.
En el caso del ozono, los valores de contingencia son alcanzados cuando se presenta baja nubosidad y alta radiación solar que favorecen su generación y vientos débiles que dificultan la dispersión de los contaminantes. En los últimos años, la ciudad ha reducido de manera muy importante los días en que se ha declarado contingencia ambiental. El ozono se produce cuando en presencia de luz solar reaccionan los compuestos orgánicos volátiles y los óxidos de nitrógeno. Los Compuestos Orgánicos Volátiles se producen por los procesos de combustión, evaporación de solventes o combustibles como la gasolina, productos de limpieza, pintura o tintas o fugas de gas LP; en tanto que los Óxidos de Nitrógeno se producen principalmente por la combustión de los automotores.
En la Ciudad de México 4 de cada 10 hogares presentan fugas de gas LP, por esta razón, de manera permanente, la Sedema pidió a la ciudadanía revisar y dar mantenimiento a las instalaciones de los tanques de gas, principalmente en las válvulas, tuberías, llaves y conexiones.
En el caso de las contingencias por partículas, éstas generalmente se presentan por la quema de pirotecnia, particularmente en las celebraciones de diciembre o bien por incendios forestales. Las siguientes gráficas muestran el comportamiento histórico de las contingencias por partículas en donde 2022 se muestra como un año por debajo del promedio:
Diversas acciones en materia de reducción de emisiones contaminantes han propiciado una importante mejora en la calidad del aire, es así como, el cierre de la refinería de Azcapotzalco, la prohibición del uso de combustibles industriales con alto contenido de azufre, la mejora de la composición de las gasolinas, la regulación cada vez más exigente que aplica a los automotores nuevos, el programa de verificación vehicular, entre otras acciones han permitido aumentar el número de días limpios.
Actualmente el Gobierno de la Ciudad de México está ampliando la oferta y cobertura del transporte público de pasajeros, elabora y aplica regulaciones locales para reducir la emisión de contaminantes proveniente de la industria que no es de competencia federal, mantiene la aplicación de los programas Hoy No Circula y Verificación Vehicular, impulsa el aprovechamiento de la energía solar, fomenta el uso de las mejores tecnologías vehiculares en diversos sectores como la electromovilidad, participa activamente en la definición y aplicación de políticas públicas en la Megalópolis, así como del mejoramiento del marco normativo nacional en materia de calidad del aire y desarrolla un enorme programa de revegetación que nunca había existido en la Ciudad de México.
Las condiciones atmosféricas y muchas de las actividades humanas generan emisiones contaminantes, por lo que todos los sectores requerimos mantener la investigación y el refuerzo de acciones que permitan continuar con la mejoría en la calidad del aire.