México.- En términos de salud y bienestar humanos el aire representa un requisito básico, cuando su calidad es mala puede llegar a poner en peligro la salud de la población si los contaminantes alcanzan concentraciones suficientemente altas.
De acuerdo con la Comisión Ambiental de la Megalópolis (Came) durante el Porfiriato y el periodo posrevolucionario, México tuvo grandes avances, lo que, en consecuencia, provocó un aumento considerable en la emisión de contaminantes de nuestro país, pues ambos periodos trajeron consigo el incremento en vías férreas, construcción de fábricas, modernización de ciudades y la reforma agraria.
No obstante, fue hasta el año de 1958 cuando la Secretaría de Salubridad y Asistencia (SSA) comenzó a realizar las primeras mediciones de la calidad del aire y sería 38 años después, en 1996 que se inició formalmente con las investigaciones acerca de la contaminación atmosférica con la implementación de cuatro estaciones de monitoreo en Ciudad de México.
En cuanto a los sistemas de monitoreo atmosférico de nuestro país, estos han evolucionado de la siguiente manera:
• En 1973 se crea la "Red Computarizada Automática de Monitoreo Atmosférico del Valle de México" que disponía de 48 equipos de monitoreo (22 instalados en la Ciudad de México y el resto en otros estados del país), pero que ante el bajo presupuesto asignado, dejó de operar en 1978.
• Para el año de 1986, con la necesidad de vigilar la calidad del aire se crea la RAMA (Red Automática de Monitoreo Atmosférico) que constaba de 25 estaciones para el monitoreo de monóxido de carbono (CO), dióxido de azufre (S02), ozono (03), óxido de nitrógeno (NOx) y partículas suspendidas y la medición de PM1O, a partir de 1998, así como incorporando en 1991 la instalación de 3 estaciones más de monitoreo en la periferia de la Ciudad de México y en 4 municipios del Estado de México.
• Actualmente, en México se cuenta con 36 sistemas de monitoreo de la calidad del aire (SMCA) en 30 entidades federativas, Quintana Roo y Baja California Sur son las únicas entidades que no poseen un SMCA en su territorio.
El Sistema de Monitoreo Atmosférico de la Ciudad de México (SIMAT) -que opera desde el 2000- se creó para homologar los procedimientos de monitoreo y difusión de la información y en 2003 incorporó la medición de partículas PM2.5.
El monitoreo que se realiza en la zona metropolitana del Valle de México, abarca las 16 alcaldías de la Ciudad de México, así como 12 municipios conurbados del Estado de México, que son: Acolman, Atizapán de Zaragoza, Chalco, Coacalco de Berriozábal, Ecatepec de Morelos, Naucalpan de Juárez, Nezahualcóyotl, Ocoyoacac, Tepotzotlán, Texcoco, Tlalnepantla de Baz y Tultitlán.
En términos operativos, el SIMAT(2) está conformado por cuatro subsistemas (RAMA, REDMA, REDMET y REDDA), un laboratorio para el análisis fisicoquímico de muestras (LAA) y un centro de procesamiento y difusión de datos (CICA).
La Megalópolis de la Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM) es la región central del país y está integrada por la Ciudad de México, el Estado de México, Hidalgo, Puebla, Morelos, Querétaro y Tlaxcala. Su dinámica de crecimiento ocasiona un gran impacto en la calidad del aire y es la Comisión Ambiental de la Megalópolis (Came) la facultada para atender este problemática.
Durante las tres últimas décadas, esta zona urbana -la más grande del país- ha tenido un gran crecimiento que obedece tanto a factores económicos como a la fuerte tendencia hacia el centralismo que caracteriza a México, concentrando, en consecuencia, algunas de sus áreas económicas más importantes en la ZMVM.
Algunas de las actividades que afectan la calidad del aire de la Megalopolis son la pérdida de las zonas agrícolas provocadas por la expansión urbana; las emisiones por la combustión; el escape de gases y vapores de gasolina cuando es administrado el combustible a os vehículos, también afectan las emisiones extraordinarias como fogatas y quemas de juegos pirotécnicos.
Estas actividades humanas cuyos efectos son acumulativos, aumentan de manera significativa los impactos negativos de la contaminación atmosférica en la población que vive o transita en la zona.
A lo anterior, se suman los efectos que tiene el cambio climático en México, en particular sobre su región central, como cambios en el clima, en la temperatura, en los vientos, en la estabilidad de la atmósfera y en las emisiones, tanto antropogénicas como biogénicas.
La Came indica que reducir las emisiones, no sólo ayudará a mejorar la calidad del aire que respiramos; además contribuirá a mitigar el cambio climático y sus impactos sobre éste.
Periferios y Sistemas es una empresa y consultora mexicana especializada en monitoreo atmosférico, fundada en 1989, realiza diseño, implementación y mantenimiento de redes de monitoreo atmosférico para proyectos públicos y privados en el equipamiento, software especializado y capacitación.
La empresa ofrece servicios personalizados que cumplen con los estándares nacionales e internacionales en:
- Diagnóstico y rehabilitación
- Mantenimiento preventivo y correctivo
- Operación y gestión de datos por estación
- Calibración acreditada