El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) está comprometido a aumentar su financiamiento positivo para la naturaleza y continuará con el proceso para desarrollar una meta de financiamiento verde. También seguirá liderando el trabajo con otros bancos multilaterales de desarrollo (BMD) para alcanzar una definición concertada de financiamiento de impacto ambiental positivo y una metodología de seguimiento para el segundo trimestre de 2023.
El BID anunció sus avances durante la 15ª Conferencia de las Naciones Unidas sobre Diversidad Biológica (COP15), que se celebra en Montreal, Canadá, del 7 al 19 de diciembre. Una delegación de alto nivel del BID asiste a la conferencia para mostrar su trabajo en biodiversidad y capital natural como principal banco multilateral de desarrollo que está impulsando esta agenda en América Latina y el Caribe.
Una economía positiva con la naturaleza puede generar oportunidades de negocios por valor de US$10 billones mediante la transformación de los sectores de alimentos, infraestructura y energía, que son responsables de casi el 80% de la pérdida de la naturaleza.
"En el BID consideramos que apoyar las inversiones de impacto ambiental positivo es fundamental para las economías y los pueblos de América Latina y el Caribe, y también para lograr la meta climática global de cero emisiones netas para 2050", dijo Juan Pablo Bonilla, Gerente del Sector de Cambio Climático y Desarrollo Sostenible.
El BID está trabajando para implementar la Declaración Conjunta sobre la Naturaleza, las Personas y el Planeta de la COP26 que el propio Banco lidera. De 2015 a 2020, el BID invirtió más de US$800 millones en 28 proyectos con componentes de soluciones basadas en la naturaleza. Estos proyectos apalancaron US$437 millones adicionales en financiamiento de socios, lo que elevó a casi US$1.250 millones el financiamiento total de proyectos.
Como parte de su alineamiento con el Marco Global de Biodiversidad de las Naciones Unidas (GBF, por sus siglas en inglés), el Banco ha desarrollado un plan de acción para su aprobación a principios de 2023 cuyo objetivo es incorporar el capital natural y la biodiversidad en todos los estamentos de la institución.
El BID será el primer banco multilateral de desarrollo con una estrategia dedicada a la incorporación del capital natural y la biodiversidad. Esto se basa en el trabajo que se está realizando para integrar la biodiversidad en los procesos de planificación nacional, actualmente en curso en 10 países.
Además, el Banco apoya mediante recursos concesionales los esfuerzos de los países para incorporar la biodiversidad en sus políticas, valorar el capital natural e integrar la naturaleza en los procesos de planificación. El BID acelerará este trabajo para apoyar a la región en la implementación del GBF y está iniciando un proceso para revisar la exposición de la cartera a la pérdida de biodiversidad.
El Banco aprobó un proyecto de canje de deuda por naturaleza de US$100 millones en Barbados que canaliza el 100% de los ahorros hacia la conservación. El proyecto marca un hito significativo para el BID, que de esta manera ayuda a sus países miembros a utilizar soluciones financieras innovadoras para abordar la biodiversidad y el cambio climático. El BID fue el primer BMD en utilizar dichos instrumentos y tiene varias transacciones similares en trámite.
A través del Natural Capital Lab (NCL), el Banco continúa trabajando con socios como Francia y el Reino Unido para desplegar fondos para la conservación de los ecosistemas, otras formas de conservación y el uso sostenible. El NCL ha obtenido 24 millones de euros de Francia más 13 millones de libras esterlinas para financiar operaciones estratégicas e innovadoras que tienen un impacto positivo en el capital natural de América Latina y el Caribe.
A través de la Iniciativa Amazonia, el BID está ayudando a Brasil, Colombia, Ecuador y Surinam a incorporar actividades regenerativas en la cuenca amazónica. Por último, el Banco continúa promoviendo enfoques financieros innovadores con BID Invest, como bonos de sostenibilidad, y con BID Lab, como financiamiento en etapa inicial, nuevas clases de activos naturales, tokenización de activos naturales, bancos de hábitat de biodiversidad, créditos de biodiversidad y plataformas digitales.