México.- Especie de importancia natural y cultural de México, endémica de la zona lacustre de Xochimilco, el ajolote (Ambystoma mexicanum) está en peligro de extinción en su ecosistema natural, una zona contaminada y afectada por aguas en mal estado, turismo irresponsable y especies de peces introducidas como la carpa y la tilapia que depredan al anfibio nacional.
Para rescatar a este animal y su hábitat, el doctor en ciencias Luis Zambrano González, titular del Laboratorio de Restauración Ecológica del Instituto de Biología (IB) de la UNAM, trabaja desde hace 20 años, junto con colaboradores y estudiantes, en el rescate de Xochimilco y en la conservación del ajolote.
En conferencia de medios, Zambrano González afirmó que para continuar su trabajo en chinampas-refugio que mantienen una barrera contra los depredadores de ajolotes, así como las labores con los chinamperos del lugar que participan en actividades agrícolas tradicionales y en cuidado de estos refugios, lanza la campaña internacional de recaudación de fondos “AdoptAxolotl”.
“No es especie si no está en su hábitat”, alertó debido al interés en los últimos años por poseer a estos anfibios como mascotas, en acuarios y hasta en caricaturas y videojuegos en varios países. “Debemos conservar la especie, y dejar que se reproduzca en su ecosistema natural, que está en nuestro país”.
En el Pabellón Nacional de la Biodiversidad del IB puntualizó que, según el último censo que realizó con su grupo en 2014, solamente hay 36 ajolotes por kilómetro cuadrado en Xochimilco, mientras que en décadas pasadas había miles y luego cientos de individuos.
Al analizar su problemática, los científicos identificaron tres situaciones: la urbanización de Xochimilco; la calidad del agua, llena de los residuos de una planta de tratamiento; y las especies introducidas -carpa y tilapia- en las décadas de los setentas y ochentas del siglo pasado, con una visión de revolución verde.
Para resolver este problema, se reactivan en la zona las chinampas, con el proyecto refugio-chinampa, que desarrolla una serie de filtros que mejoran la calidad del agua y el hábitat del ajolote.
En su oportunidad, la coordinadora de la campaña, Diana Laura Vázquez Mendoza, explicó que tienen dos esquemas de donación directa: Invita a cenar a un ajolote, para los insumos del mantenimiento de la colonia; y otro que se llama Tunea la casa del ajolote, dirigido al mantenimiento de chinampas-refugio en Xochimilco.
En los programas de adopción virtual, con 200 pesos se puede invitar a cenar a un ajolote, con 1000 tunear su casa y, si se desea donar más recursos, se puede adoptar un ejemplar o su casa por uno o seis meses y hasta por un año.
Vázquez Mendoza detalló que dependiendo de la donación, se recibirán posters informativos, postcards, ponerle nombre a un ajolote o a las chinampas-refugio en un esfuerzo por personalizarlas.
Actualmente, la UNAM y los chinamperos trabajan con 48 chinampas-refugios, que corresponden a poco más de cinco kilómetros lineales de canales, en donde el ajolote y otras especies pueden vivir sin amenazas.
A su vez, el director de Operaciones de la Dirección General de Servicios Administrativos de Tienda en Línea UNAM, Juan de Dios González Razo, invitó a visitar la página tiendaenlinea.
“Aquí podrán encontrar todos los paquetes, está lista para que puedan hacer la compra de lo que acaban de mencionar, y también nos pueden seguir en redes sociales: Facebook, Twitter e Instagram también como tiendaenlinea para que puedan hacer las aportaciones al proyecto tan valioso”.