Cartagena (Colombia).- Científicos colombianos iniciaron este miércoles la Expedición Científica Cordillera Beata, que pretende explorar el medio ambiente y la biodiversidad en un área submarina que abarca 3.5 millones de hectáreas en el Caribe, en la parte de la península de la Guajira.
El ministro de Ambiente y Desarrollo sostenible, Carlos Eduardo Correa, explicó que "hace 10 años hablamos de poder llegar a 200 o 300 metros de profundidad en el mar, hoy a través de robots especializados vamos a poder llegar hasta los 3 mil metros a explorar todo lo que está sucediendo allá abajo en nuestros océanos".
"Gente y talento calificados, científicos del país que van a poder traer conocimiento y poder llevar conocimiento", dijo Correa durante la despedida de la expedición en Cartagena de Indias.
Los científicos pretenden recopilar información para sustentar la declaratoria de esta nueva área marina protegida, también observar e identificar la fauna en profundidad; recolectar datos sobre el componente oceanográfico del área como base para la descripción de los ambientes marinos.
Esta expedición forma parte de la promesa de Colombia de conseguir que su sistema nacional de áreas protegidas cubra el 30% de áreas marinas protegidas, una promesa del presidente de Colombia, Iván Duque, en la COP26 de Cambio Climático.
Objetivos de la expedición
La expedición integrada por 68 personas realizará durante 31 días "un levantamiento de información en esa zona llamada Cordillera de Beata, que es un accidente geográfico submarino que marca toda una oceanografía y una serie de atributos", aseveró el director general del Instituto de investigaciones Marinas y Costeras (Invemar), Francisco Arias.
Por eso, continuó Arias, "el propósito central es ir y mirar qué hay allí, ver esas formas submarinas, ver cómo esas formas orientan las corrientes, cómo esas corrientes hacen que esa riqueza en biodiversidad se instale y produzca todas esas maravillas desde el punto de vista ambiental que tenemos ahí".
Evaluarán la calidad del agua y obtendrán muestras biológicas; también realizarán un inventario de ocurrencia de mamíferos marinos, aves y tortugas.
La segunda parte de investigación
El Gobierno pretende repetir este mismo ejercicio en 31 días en el Pacífico colombiano, en la zona de Malpelo, Yuruparí y Lomas, "pero ya no en 3.5 millones de hectáreas sino en más de 10 millones de hectáreas para unir ese corredor del Pacífico con Ecuador, Panamá y Costa Rica", explicó el ministro.
Los científicos calificaron la expedición como un paso muy importante para el conocimiento de la biodiversidad y el medioambiente de Colombia, pero reconocieron que el país está aun muy lejos de alcanzar el nivel de conocimiento de sus mares y recursos submarinos.
"Estimamos que apenas un 5% de nuestros territorios marinos están en el nivel de conocimiento que quisiéramos, que deberíamos para administrarlos bien", dijo el director de Invemar.
También usarán técnicas novedosas: "Cada vez que un organismo transita por las aguas deja una huella de ADN; vamos a colectar agua, analizarla en los laboratorios e identificar esas piezas de ADN que quedan dispersas en el medio para intentar la identificación de las especies que están o estuvieron en algún momento presentes en la zona de estudio", expuso Arias.
También anunció que realizarán exploración con ROV (Remotely Operated Vehicle o vehículos operados por control remoto).
La cordillera Beata es un monte submarino de 450 kilómetros de largo y 300 de ancho con profundidades que oscilan entre los mil 500 metros hasta los 4 mil 400 metros.