Ocampo, Michoacán.- Las mariposas Monarca iniciaron este sábado su regreso estacional a Canadá tras una de sus peores temporadas en territorio mexicano, con una disminución anual de su presencia de 26 %.
Los emblemáticos insectos de Norteamérica comenzaron a abandonar sitios como el Santuario el Rosario, en el municipio de Ocampo del estado de Michoacán, en el suroeste de México, tras una migración anual que suele empezar en noviembre y terminar en marzo.
Pero un reporte del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) documentó una reducción del 26 % en la temporada de invierno de 2020-2021 en la presencia de la Monarca al ocupar apenas poco más de 5 2.02 hectáreas frente a las 2.82 hectáreas de 2019-2020.
Según el análisis, la tala ilegal fue la principal causa, lo que representó 13.36 hectáreas de deforestación
En contraste, la temporada 2018-2019 reportó una ocupación de 6.05 hectáreas, lo que significa que su presencia se ha reducido dos tercios o 66% desde entonces hasta ahora.
El WWF también documentó un incremento anual de cuatro veces del área degrada de bosques mexicanos que sirven como reserva para el insecto.
Mientras que en marzo de 2019 registró 4.99 hectáreas degradados, el número creció 20.26 hectáreas en 2020.
"Según el análisis, la tala ilegal fue la principal causa, lo que representó 13.36 hectáreas de deforestación", expuso la WWF.
La ruta de la mariposa Monarca incluye sitios de hibernación hacia Estados Unidos y Canadá, en la que participan de tres a cuatro generaciones de mariposas.
En la migración de otoño, cuando llegan a México, solo una generación viene a la nación.
En la ruta migran dos poblaciones de mariposas: la del este, la más conocida y de distribución trinacional, y la del oeste, que va de Estados Unidos a México.
Las mariposas recorren la Sierra Madre Occidental con sitios en México donde también hibernan.
La degradación del área de las mariposas Monarca ha despertado iniciativas como "Atlas por el campo", un proyecto lanzado esta semana con apoyo de la Agencia Alemana de Cooperación (GIZ).
El programa ha advertido de la necesidad de proteger estos insectos, además de abejas y colibríes, al exponer que en México el 85 % de los cultivos depende de la polinización