México.- En el marco del proyecto Fortalecimiento de la capacidad adaptativa de áreas marinas protegidas, impulsado por la Comisión para la Cooperación Ambiental (CCA), y en colaboración con Parks Canada, la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA) y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), el cual tiene el objetivo de fortalecer las capacidades de las personas que colaboran y administran las áreas marinas protegidas para gestionar los impactos del cambio climáticos en estos sitios y fortalecer la resiliencia en costas y océanos; el 22 de octubre de 2020 se llevó a cabo el Taller Nacional de Carbono Azul para México.
El evento contó con palabras de bienvenida por parte de Marco Antonio Heredia Fragoso de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Roberto Aviña Carlín, Comisionado Nacional de Áreas Naturales Protegidas de la Conanp, Claudia Octaviano Villasana, Coordinadora General de Mitigación del Cambio Climático del Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (Inecc), y Lucie Robidoux, Titular de la Unidad de Ecosistemas de la CCA.
Los funcionarios destacaron la importancia de continuar impulsando la colaboración trinacional a través de la CCA, y sobre todo en el contexto del nuevo acuerdo comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), para obtener resultados tangibles, que permitan avanzar en la política pública de cambio climático y en la toma de decisiones.
Se hizo hincapié en el papel que tienen los manglares, pastos marinos y marismas para la adaptación y mitigación del cambio climático, por lo que es necesario entender mejor el rol de estos ecosistemas marinos y el potencial que tienen para el almacenamiento de carbono azul.
Esta información es fundamental para el diseño de políticas públicas, para la implementación de soluciones basadas en la naturaleza y para la obtención de financiamiento climático.
La CCA es una organización creada para fomentar la colaboración entre los tres países de América del Norte en temas de medio ambiente, y en los últimos 25 años ha trabajado diversos temas, incluyendo el de carbono azul.
Como parte de esta cooperación, se desarrolló un Mapa de Distribución de los Ecosistemas de Carbono Azul en América del Norte y actualmente se busca actualizar dicho instrumento e integrar el tema en la gestión y planificación de las áreas naturales protegidas, en un contexto de cambio climático.
Uno de los objetivos del taller fue identificar retos, fortalezas y oportunidades para la colaboración nacional e internacional en materia de carbono azul, por lo que se organizaron mesas de trabajo virtuales para que expertos de la sociedad civil, academia y gobierno federal aportaran información que permita más adelante orientar el desarrollo de instrumentos de política y herramientas técnicas que contribuyan a la implementación de acciones en el territorio para la conservación, restauración y manejo de los ecosistemas de carbono azul, en un contexto de cambio climático.
En el evento también participaron representantes del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (CINVESTAV) y la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio), quienes presentaron el estado del arte en la distribución de los ecosistemas de carbono azul en México y las herramientas disponibles que existen en nuestro país.
La información presentada mostró que, de acuerdo a la información disponible en la actualidad, la Península de Yucatán almacena la mayor cantidad de carbono azul en México. Asimismo, hay áreas naturales protegidas clave, en las que es necesario evaluar el contenido de carbono azul para pastos marinos, como el Área de Protección de Flora y Fauna Yum Balam, la Reserva de la Biosfera Los Petenes y el Parque Nacional Sistema Arrecifal Veracruzano. También es necesario fortalecer los estudios en el centro y Pacífico sur.
En México hay un gran avance en cartografía de manglares, pero en ecosistemas como pastos marinos y marismas, aun hace falta mucha información para establecer líneas bases.
Actualmente, la Conabio se encuentra actualizando la cartografía de manglares de 2015 y se espera que este año se concluya. Para más información acerca de las herramientas disponibles, se recomienda visitar el Portal de Geoinformación 2020 de la Conabio.
Finalmente, se hizo una revisión de los avances en la actualización del Mapa de Distribución de los Ecosistemas de Carbono azul en América del Norte y se discutieron los retos que existen para el procesamiento de la información espacial. Los participantes del taller tendrán la oportunidad de retroalimentar el producto a través de una plataforma en línea y de aportar los insumos que consideren relevantes para que la conclusión de este esfuerzo.
Este taller se logró gracias a un gran esfuerzo de colaboración entre Conanp, Semarnat e Inecc, apoyado por la CCA. Los resultados ayudarán a avanzar en el conocimiento en temas de carbono azul para su cuantificación, conservación e incremento en México y para identificar acciones que abonen al cumplimiento de los compromisos de nuestro país, como las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional. También permitirán identificar desafíos comunes, que podrían abordarse con la cooperación trinacional y la participación de actores clave.