México.- La conservación del Flamenco del Caribe (Phoneicopterus ruber) es el resultado de grandes esfuerzos de múltiples actores. Durante más de 15 años, la Fundación Pedro y Elena Hernández ha sido un actor relevante para la conservación de la especie y su hábitat.
Actualmente esta organización opera el “Programa de Conservación del Flamenco en México”, en estrecha coordinación técnica y financiera con el gobierno federal a través de la CONANP.
El programa de la fundación se enfoca en el monitoreo de la especie y en el trabajo comunitario de sensibilización y educación para la conservación del flamenco
Este monitoreo ha llevado a la construcción de una base de datos especializada de más de 5 mil flamencos del Caribe, la cual a partir de 2020- 2021 estará accesible a otros usuarios especializados para profundizar en temas de conservación y preservación de la especie.
Los avances durante 2019 han sido extensos, hoy día se cuentan con 9 rastreadores satelitales activos, los cuales han dado la certeza de que estas aves vuelan hasta 500 Km en una noche y que remontan su vuelo a lugares tan lejanos como a las costas del Pinar del Río y Matanzas en Cuba.
Durante 2020 se planea instalar 4 rastreadores más logrando la cobertura satelital más completa.
El segundo avance del 2019 ha sido el mejorar las técnicas en el monitoreo de aves impulsando nuevas tecnologías como videos en 4k y fotografías de alta resolución desde aeronaves tripuladas, las cuales finalmente se cruza con sistemas de información geográfica, el cruce de estos datos con sistemas computarizados de punta, ha ofrecido un análisis sin precedente en el monitoreo de aves.
En la actualidad, la suma de estos esfuerzos permite tener un 90 por ciento de exactitud en los conteos, en 2020 se buscará que este sistema sea 100 por ciento automatizado.
No obstante, aún existen en la península áreas dispersas donde el monitoreo de aves se realiza mediante la observación directa, estos espacios también han implementado nuevas tecnologías como el uso de drones DJI Phanton que facilitan la visualización de aves en lugares de difíciles accesos y ayudan a la protección de las colonias al detectar amenazas como perros ferales y otro tipo depredadores que pueden poner en riesgo a la colonia.