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Este 31 de julio se celebra a los guardabosques en todo el mundo, una iniciativa de la Federación Internacional de Guardaparques dedicada desde 1992 a quienes protegen los tesoros naturales del planeta, así como a los que han perdido la vida en cumplimiento de su deber.
El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) destacó que muchas especies son protegidas por los guardabosques y uno de los casos más exitosos es el del gorila de montaña que, gracias a muchos cuidados, ha duplicado su población en los últimos 30 años.
"No debemos olvidar el importante trabajo en los ‘parques de conflicto’ en la República Democrática del Congo: Garama, Virunga, Maiko y Kahuzi-Biega. Solo en Virunga han muerto 200 guardabosques en 20 años", indicó el coordinador de ONU Medio Ambiente en la Alianza para la Supervivencia de los Grandes Simios, Johannes Refisch.
"En noviembre de 2018, la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza declaró que el gorila de montaña ya no está en peligro crítico. Su estatus fue reclasificado a la categoría en peligro debido a los esfuerzos de conservación", destacó el PNUMA en su portal en Internet.
En el caso de México, los profesionales en esta rama se encargan del cuidado y manejo de las Áreas Naturales Protegidas (ANP), sitios en los que se implementan planes de manejo, proyectos y estrategias, las cuales cuentan con apoyo y cooperación internacional.
De acuerdo con la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), la Federación Internacional de Guardaparques representa a más de 45 países y cada tres años se lleva a cabo un congreso de talla mundial con el objetivo de hacer una evaluación de la situación entre los conservacionistas.
Los también llamados manejadores de vida silvestre o técnicos de campo defienden el patrimonio natural, cultural y recreacional del planeta a través de diferentes medios y técnicas; y además concientizan a la población sobre la importancia del uso sostenible de los recursos.
En territorio nacional los guardaparques documentan la riqueza de casi 200 áreas protegidas (terrestres, marinas e insulares) que son administradas por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) en nueve regiones.
Ellos llevan a cabo monitoreos biológicos, imparten educación ambiental, previenen incendios forestales y detectan riesgos, además de dar atención a los visitantes, seguimiento a los proyectos comunitarios, desarrollan trabajo científico para delimitar ecosistemas y ecorregiones.
Además, realizan diversos estudios de fauna y flora para resguardarlas y conservarlas; porque algunas de sus especies se encuentran en peligro.
La Conanp añadió que los guardaparques son parte de las brigadas para combatir incendios forestales, fungen como mediadores en conflictos socio-ambientales y como conciliadores ante los principales actores de las áreas naturales.