Managua.- El incendio inició el miércoles en las afueras de la ciudad de Matagalpa, ubicada en la zona norte de Nicaragua, a unos 129 kilómetros de Managua.
El Gobierno de Nicaragua comunicó que aproximadamente 30 hectáreas de bosques de pino fueron devastadas por el fuego, y que la cantidad podría crecer mientras no se tenga control de las llamas.
Los bomberos también informaron de afectaciones a la fauna, en especial pequeños mamíferos como venados, las guardatinajas (agouti paca) y guatusas (dasyprocta punctata), sí como iguanas, serpientes o aves.
Los altos niveles de combustión que ofrecen los pinares y la maleza, así como la velocidad de los vientos, hace difícil las labores para sofocar el fuego, según los bomberos.
Las llamas alcanzaron las jurisdicciones de al menos tres comunidades rurales del norte de Matagalpa, indicaron las autoridades.
En marzo de 2018 unas 900 hectáreas de bosques de pino fueron calcinadas en la zona norte de Nicaragua, y al mes siguiente un incendio quemó 5,945 hectáreas de bosque virgen en la reserva Indio Maíz, lo que desató protestas estudiantiles que precedieron al estallido social contra el presidente Daniel Ortega.
El estatal Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención de Desastres (Sinapred) ha divulgado una serie de medidas que buscan prevenir los incendios forestales y agropecuarios en Nicaragua.
El Sinapred ha recomendado evitar tirar colillas de cigarro encendidas en los bosques, campos y potreros, y en caso de hacerlo, asegurarse de pisarlo bien con el zapato o echándole tierra.
Las autoridades también han insistido a los cazadores en que no utilicen el fuego como técnica de cacería.
Nicaragua pierde cada año 70,000 hectáreas de cobertura forestal, según los datos oficiales.