México.- La profesora de la Facultad de Química de la UNAM, Laura Gasque Silva, señaló que el hidrógeno está combinado químicamente en todas las moléculas orgánicas existentes como en el agua o los alcoholes y para obtenerlo se requiere un gasto de energía, de lograrse que sea mediante energía renovable sería más factible su uso.
Aunque en la tierra el hidrógeno representa el 15 por ciento, constituyendo el 0.9 por ciento de la masa, y el helio ocupa en la atmósfera terrestre el 0.00052 por ciento, en el cosmos representan el 90 por ciento y siete por ciento, respectivamente.
El hidrógeno puede convertirse en el combustible del futuro, pero antes se debe garantizar que su manejo no sea demasiado riesgoso ya que se obtiene a partir de carbón, hidrocarburos y agua con la ayuda de un catalizador.
Entre sus usos se encuentra la fabricación de fertilizantes, hidrogenar compuestos orgánicos o para producir metanol, también como combustible que impulsa cohetes espaciales y automóviles, estos últimos considerados como una tecnología muy costosa.
Mientras que el helio, segundo elemento de la tabla periódica, se consigue de la desintegración radioactiva del uranio y al no interactuar con otros elementos químicos escapa muy fácilmente de la atmósfera terrestre, explicó Gasque Silva.
Su uso se encuentra en crisis porque su abasto es finito y la gravedad de la tierra no hace que se detenga, por lo cual se utilizan tanques especiales para contenerlo, explicó la investigadora, de acuerdo con la Academia Mexicana de Ciencias (AMC).
Comúnmente se utiliza para enfriar a temperaturas muy bajas imanes superconductores que conforman los aparatos de imagen de resonancia magnética nuclear en los hospitales, pero se está acabando principalmente en globos decorativos, añadió.
En el 2019 se conmemora el Año Internacional de la Tabla Periódica de los Elementos Químicos, proclamado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), para ahondar sobre cada uno de los elementos químicos.
La primera versión de ella fue una propuesta del ruso Dmitri Mendeléiev hace 150 años.
Los elementos se relacionan unos con otros y su ubicación se determina por sus propiedades, al ver los elementos que lo rodean y al compararlos se puede deducir las propiedades que tiene cada uno, apuntó la profesora.