México. La Cámara de Senadores aprobó una reforma para fortalecer los programas de Protección Civil y los Atlas de Riesgos, documentos que buscan prevenir y mitigar el impacto de los fenómenos naturales.
Con 94 votos a favor, la Asamblea avaló el dictamen que modifica el artículo 82 de la Ley General de Protección Civil.
La propuesta plantea que el Gobierno federal, con la participación de las entidades federativas, además de la información climatológica, geológica, meteorológica y astronómica, concentre la información sobre factores de riesgo químico-tecnológico, sanitario-ecológico y socio-organizativo presentes en las distintas regiones del país.
En el documento, las y los senadores destacaron que dicha información es importante para la elaboración de los programas de Protección Civil, así como para los Atlas de Riesgos que elaboran los tres órdenes de gobierno, de acuerdo con sus respectivos ámbitos de competencia.
Explicaron que los fenómenos químico-tecnológicos son los agentes perturbadores que se generan por la acción violenta de diferentes sustancias derivadas de su interacción molecular o nuclear, y que comprende fenómenos destructivos como incendios de todo tipo, explosiones, fugas tóxicas, radiaciones y derrames.
Que los sanitario-ecológicos se definen como agentes perturbadores que se generan por la acción patógena de agentes biológicos que afectan a la población, a los animales y a las cosechas, causando su muerte o la alteración de su salud. Las epidemias o plagas constituyen un desastre sanitario en el sentido estricto del término. En esta clasificación también se ubica la contaminación del aire, agua, suelo y alimentos.
Las y los senadores refirieron en el dictamen, que los fenómenos socio-organizativos son agentes perturbadores que se generan con motivo de errores humanos o por acciones premeditadas, que se dan en el marco de grandes concentraciones o movimientos masivos de población, tales como demostraciones de inconformidad social, concentración masiva de población.
Además de terrorismo, sabotaje, vandalismo, accidentes aéreos, marítimos o terrestres, e interrupción o afectación de los servicios básicos o de infraestructura estratégica; marítimos o terrestres, e interrupción o afectación de los servicios básicos o de infraestructura estratégica.
Explicaron que México, además de tener un extenso territorio y una gran población, es un país expuesto a múltiples fenómenos naturales, que provocan daños y pérdidas materiales, económicas y humanas, por lo que es importante buscar la reducción de estos con la correcta implementación de las medidas de prevención.