A partir del 1° de junio de 2023 inició la tercera onda de calor, que pronostica temperaturas máximas de 40 a 45 grados Celsius, de acuerdo con la Comisión Nacional del Agua. En este sentido, Trane nos comparte información de cómo cada inicio de temporada de calor es una nueva oportunidad para aprender sobre los edificios y las potenciales áreas de oportunidad de mejora para el rendimiento, la eficiencia energética y el confort de los habitantes y visitantes.
Las olas de calor también impacta en el desempeño de los edificios, generando que los sistemas y equipos de aire acondicionado se enfrenten a mayores demandas de enfriamiento durante los días más calurosos. Sin embargo, este trabajo adicional en los sistemas de aire acondicionado para edificios puede ayudar a exponer las debilidades que deben abordarse, así como presentar oportunidades de mejora.
Para Trane, compañía de sistemas de aire acondicionado enfocada en crear ambientes interiores cómodos y energéticamente eficientes, evaluar el desempeño de los sistemas de aire acondicionado para edificios antes, durante y después de temporadas de alta exigencia, ayuda a obtener una imagen más clara del estado de los equipos y permite a los dueños de edificios prepararse mejor para la próxima temporada de calor.
¿Por qué es importante conocer el desempeño del edificio?
Es muy común prestar más atención al uso de energía eléctrica de los edificios durante las temporadas de calor, lo cual tiene sentido porque los días de mayor demanda pueden generar facturas más altas cada mes; sin embargo, también es importante conocer cuál es el gasto energético base de cada edificio, ya que México es la octava región del mundo con mayor gasto energético derivado del uso de aire acondicionado.
En los meses más calurosos, los sistemas de aire acondicionado para edificios funcionan con mayor frecuencia para satisfacer la demanda, incluso en las noches o los fines de semana, cuando normalmente se espera que el edificio se encuentre en sus puntos más bajos. Conocer el gasto energético base del edificio, así como cuándo y por qué varía puede ayudar a administrarlo mejor.
La primavera también puede revelar si estás usando correctamente las capacidades del sistema de automatización de edificios en cuanto a puntos de ajuste y programación. Un gran número de edificios comerciales no utilizan estas funciones de control de la mejor forma posible, incluso en días festivos o fines de semana cuando los edificios se encuentran deshabitados. Esto hace que los edificios sigan funcionando de forma ineficiente, afectando tanto el bolsillo como el medio ambiente.
Confiar en la automatización es la clave
Para ayudar a administrar mejor el consumo energético de los edificios e implementar puntos de ajuste u horarios que optimicen la eficiencia del equipo y del sistema, es importante confiar en los controles para automatización de edificios. La clave es dejar que estos sistemas funcionen como están diseñados y evitar la tentación de intervenirlos.
Por ejemplo, se puede pensar que poner un límite del 70% del uso del equipo de aire acondicionado es más eficiente; sin embargo, esto puede dar lugar a un aumento de la temperatura del espacio interior del edificio, lo que provoca picos en la demanda. Dejar que el sistema de aire acondicionado funcione en la capacidad indicada cuando sea necesario, puede ser más eficiente que intentar “ayudarlo”.
Además, un edificio con sistema automatizado de aire acondicionado optimizado puede ayudar a descubrir fallas potenciales en el equipo o problemas de mantenimiento. Esto permite resolver cualquier problema con más rapidez, reduciendo también los costos de un mantenimiento reactivo.
“Contar con un sistema de automatización es solo el primer paso, debemos aprender a confiar en toda la ingeniería que hay detrás de los controles y equipos. Estos están programados para funcionar y adaptarse a cada edificio, en búsqueda de optimizar recursos en todo momento”, comentó Carlos García, Director General de Trane México.
Dos revisiones al año, cuidan de daños
Lo recomendable es realizar mantenimiento a los equipos cada 6 meses para ajustar en las temporadas de altas y bajas temperaturas, aunque también es importante que el equipo involucrado en la operación diaria de los sistemas documente y haga un seguimiento de posibles áreas de oportunidad con el objetivo de tener mayor visibilidad sobre posibles fallas y sean más fáciles de abordar por los profesionales.
Realizar mantenimientos periódicos a los sistemas de aire acondicionado para edificios permite evitar problemas de rendimiento y eficiencia energética de los edificios a través de estrategias de conservación de energía, sobre todo en temporada de calor. De esta forma, todo estará listo para cuando incremente la demanda en verano o invierno.
“Monitorear el desempeño de los equipos periódicamente permite planificar y presupuestar posibles mejoras o actualizaciones. Estas inversiones pueden ayudar a aprovechar al máximo todo el sistema del edificio, e incluso, puede llegar a redituar en una mayor eficiencia y reducir las facturas de servicios durante todo el año y, en especial, en los meses de mayor calor o frío”, concluyó Carlos García.