En la actualidad, muchas empresas buscan crear conciencia y tomar acción sobre temas como el calentamiento global, la contaminación del aire o el agua, o el consumo insostenible de elementos como los plásticos; donde los ciudadanos, gobiernos y empresas se ven involucrados como agentes de cambio, y uno de los enfoques es lograr la sustentabilidad en su infraestructura.
Una de las estrategias con las que las empresas buscan impactar de forma positiva al medio ambiente es contar con programas ESG (Medio Ambiente, Social y Gobernanza, por sus siglas en inglés), con los cuales reducen temas como la contaminación, la generación de residuos, la emisión de gases de efecto invernadero en sus operaciones y se mejora la eficiencia energética de los edificios.
Un estudio reciente estima que el 64% de las empresas en México cuentan con una estrategia de ESG; sin embargo, solo el 48% considera de gran relevancia atender como prioridad temas relacionados con el cambio climático, entre los que destacan la transición energética y la economía circular, dos temas clave para la reducción de emisiones.
Para Trane México, empresa líder en creación y mantenimiento de aire acondicionado, comprometida con la reducción de emisiones y la eficiencia energética en edificios, uno de los principales aspectos donde se pueden enfocar programas ESG para reducir emisiones de gases de efecto invernadero, es en las operaciones de los edificios.
¿Por qué es importante un edificio para una estrategia de sustentabilidad o ESG?
Una estrategia ESG incluye acciones enfocadas a la sustentabilidad ambiental, como lo es el impacto de una empresa u organización en temas como el cambio climático, la contaminación, los recursos, la seguridad del agua, la biodiversidad, entre otras
Una empresa u organización con objetivos de sustentabilidad ambiental debe buscar cómo ayudar a que los edificios que utiliza para sus actividades como oficinas o centros de fabricación o distribución, sean más eficientes para reducir el consumo de energía y las emisiones que generan sus operaciones, al mismo tiempo que busca prepararse para el futuro a través de equipos electrificados y contar con soluciones para la generación de energía renovable.
“Los edificios generan el 40% de las emisiones globales anuales de CO², por lo que la huella de carbono de los inmuebles donde trabajamos, estudiamos y vivimos representan una oportunidad importante para generar un impacto positivo en el medio ambiente”, comenta Carlos García, Director General de Trane México.
Trane, por ejemplo, cuenta con el Reto de la Gigatonelada, a través de la cual busca reducir la energía y las emisiones que generan sus operaciones y las de sus clientes, reduciendo la huella de carbono en una gigatonelada para 2030. Esta cifra equivale al 2% de las emisiones anuales de todo el mundo, por lo que representa uno de los mayores compromisos con el medio ambiente asumido por una empresa B2B.
Considerar estos cambios como parte de un programa integral puede ayudar a priorizar las medidas que más aporten a los objetivos de sustentabilidad e identificar los mecanismos de financiamiento apropiados para minimizar los gastos y maximizar el retorno de la inversión, mientras se protege al medio ambiente.
¿Por dónde pueden comenzar las compañías su camino a la sustentabilidad?
“El primer paso para cada compañía debe basarse en sus objetivos específicos. Cuando se habla de sustentabilidad ambiental en infraestructura, la punta de lanza es la descarbonización, que es el proceso de eliminar o reducir al mínimo las emisiones de carbono que generan las operaciones de los edificios, la energía eléctrica y las fuentes de calefacción y aire acondicionado para edificios”, agregó Carlos García.
Por lo tanto, cada organización tiene diferentes objetivos, desde la reducción de emisiones hasta conseguir la meta de cero emisiones netas, y para cada una existen diferentes formas de lograrlo.
Es común que los líderes y tomadores de decisiones tengan dudas acerca de ciertos términos relacionados con la descarbonización y la sustentabilidad, ya que en ocasiones parecen ser muy similares. A continuación se presentan algunas de las estrategias ESG actuales más comunes para alcanzar estos objetivos:
- Neutralidad de carbono: Cuando los gases de efecto invernadero liberados a la atmósfera son iguales a los eliminados en la atmósfera.
- Es el proceso de cambiar las fuentes de energía del edificio provenientes de combustibles fósiles a fuentes eléctricas.
- Eficiencia energética: Reducir la cantidad de energía eléctrica que se necesita para alimentar un proceso o equipo, mientras se mantiene el mismo rendimiento.
- Net Zero:Consumir solo la energía que se produce. Lograr un equilibrio sustentable entre la disponibilidad y la demanda de agua, así como eliminar desechos sólidos que se envían a los basureros.
- Cero emisiones: Estrategia para no liberar emisiones durante la producción de energía.
- Transición a refrigerantes de bajo GWP (Potencial de calentamiento global)en equipos de Calefacción, Ventilación y Aire acondicionado, que además se suma a los esfuerzo en el mantenimiento adecuado para minimizar fugas.
¿Cumplir con los objetivos de sustentabilidad ambiental en edificios, genera algún valor financiero para las organizaciones?
Estudios recientes demuestran que los ejecutivos y profesionales en inversiones creen que los programas enfocados en el cumplimiento de objetivos ESG tienen un impacto positivo. El 83% de estos profesionales indicaron que esperan que los programas ESG generen valor para los accionistas con el tiempo². De igual forma, casi el 100% de los encuestados está de acuerdo en que los programas de sustentabilidad ambiental ayudan a mejorar el desempeño financiero, particularmente los beneficios están dirigidos a la reputación de la marca, el desempeño competitivo y el cumplimiento de las expectativas sociales sobre un comportamiento corporativo en beneficio de la comunidad.²
“Emprender esfuerzos para descarbonizar la infraestructura de los edificios e impulsar la sustentabilidad ambiental, también brinda beneficios financieros a las organizaciones. Además del impacto ambiental, las medidas de eficiencia energética en edificios pueden ayudar a disminuir los costos operativos. Las mejoras de los edificios a menudo tienen un impacto positivo en el ambiente interior de un edificio, y la generación de energía renovable puede mejorar la resiliencia de las organizaciones”, finalizó Carlos García.