Naciones Unidas.- Abordar dos de las amenazas más graves del mundo: la contaminación del aire y la crisis climática, es fundamental para garantizar un futuro sostenible, destacó la directora ejecutiva del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), Inger Andersen.
Durante su estancia en la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en Nueva York, donde participa en la Cumbre sobre la Acción Climática 2019, Andersen subrayó la necesidad de reducir la contaminación del aire mientras se acelera la acción climática y se mejora la salud humana.
“Necesitamos abordar con urgencia el cambio climático y evitar que las temperaturas excedan los umbrales peligrosos. La reducción de contaminantes climáticos de corta duración es un ingrediente esencial de nuestra estrategia”, dijo.
Indicó que el aire contaminado está causando la muerte a millones de personas en todo el mundo, además de afectar prematura y severamente su calidad de vida.
Los líderes que asistieron la víspera a las cumbres de los Objetivos de Acción Climática y Desarrollo Sostenible, así como a las actividades relacionadas con la Reunión de alto nivel sobre la cobertura universal de salud, como el recorrido por una instalación colocada por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Ésta se llamó "Cápsulas de contaminación" del artista escocés Michael Pinsky, quien recreó la calidad del aire en cinco ciudades de todo el mundo.
Recientemente la OMS calificó la contaminación del aire como una emergencia de salud pública mundial, ya que según estimaciones nueve de cada 10 personas respiran aire con altos niveles de contaminantes.