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México.- En el debate de la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos en Materia de Plásticos en el Senado de la República, la comunidad ambientalista considera importante que la legislación “ataque el origen del problema” para guiar al país hacia una sociedad libre de plásticos de un solo uso.
El vicepresidente de la organización Oceana México, Pedro Zapata, dijo que si bien la legislación representa un “buen principio, le hacen falta todavía algunas modificaciones y eso es en lo que vamos a estar trabajando con la Comisión de Medio Ambiente”.
Afirmó que deben evitarse las “soluciones falsas” y atacar el origen del problema, que es la creación de plásticos. Si bien apuntó que es un buen método que genera una economía sustentable y debe impusarse, “no es suficiente” para resolver la crisis que tiene el país.
Sostuvo que el propósito de la ley debe ser reducir la cantidad de productos plásticos que ingresa a la economía “y la única forma en que haya menos plástico en el ambiente es haciendo menos”.
El fabricante de cualquier artículo plástico debe ser responsable del impacto de su producto al medio ambiente hasta el fin de su vida útil.
Propuso que la legislación debe establecer el concepto de responsabilidad extendida del productor, es decir, que el fabricante de cualquier artículo plástico sea responsable del impacto de su producto al medio ambiente hasta el fin de su vida útil.
Con ello, los fabricantes tendrán que dejar de pasar la responsabilidad al consumidor, el producto plástico “en realidad es responsabilidad de quien lo hizo”, dijo el representante de una de las organizaciones de mayor influencia en la protección y conservación de mares y océanos.
También, afirmó que se pedirá que la ley no caiga en falsas soluciones como la propuesta de la quema de basura, lo que resultaría con un alto impacto al medio ambiente.
Reconoció que la eliminación de ciertos tipos de plásticos para el rescate del medio ambiente impactaría en el desarrollo de ese sector económico e incluso en el nivel de empleos, sin embargo el proceso de legislación debe ser siempre a favor del bien común.
Según el proyecto de ley, México es uno de los países con mayores problemas de contaminación por la gestión inadecuada de residuos, que se calcula producirá hasta 65 millones de toneladas para el año 2030.
Resaltó que hay ciertos tipos de plásticos que no se deben eliminar, como los que se usan en la industria médica, pero otros tantos ya tienen sustitutos en el mercado y con mucho menos impacto al planeta, como los popotes que ya se fabrican de materiales durables.
Esos plásticos de un solo uso deben eliminarse, afirmó “sobre todo porque hay materiales para producir el mismo artículo, y están disponibles y al alcance de la sociedad” y ahí la industria puede tener la versatilidad de cambia su tipo de producción para evitar o minimizar el impacto socio-económico.
Asimismo, los plásticos representan hasta el 85 por ciento del total de los residuos encontrados en las playas, no obstante, solo se ha legislado al respecto en algunos estados, así que “se necesita en una ley federal que sea congruente con las políticas internacionales”, manifestó.